¿Podría un terremoto como el de Italia producirse en España? Hablan los expertos

Elsa Alonso 27/10/2016 10:48

El peligro de la Península Ibérica ante estos desastres naturales es evidente. De hecho, según nos explica Raúl Pérez López, geólogo investigador del Instituto Geológico y Minero de España y experto en terremotos: "Algunos estudios paleosísmicos sugieren que se han producido varios seismos hace miles y cientos de miles de años en España con magnitudes de entre 6.8 y 7.3 grados de magnitud".

¿Es posible el efecto en cadena que afecte a España?

La respuesta que da la ciencia es clara y contundente: "No. Este terremoto no puede repercutir en las fallas activas de España", aclara Pérez.

¿Por qué? "Un terremoto de 6,1 tiene un área de influencia de efectos geológicos asociados de varios cientos de kilómetros cuadrados a varios miles, la longitud de ruptura de la falla en superficie [lo que ha pasado en Italia] es de varias docenas de kilómetros y la transferencia de esfuerzos difícilmente pasa de 50 km", explica Pérez.

La clave, en las microcapas terrestres que forman fallas

En Italia hay una cordillera central orientada a los Apeninos, desde el Golfo de Taranto hasta la cuenca del Po. En ella, convergen microcapas terrestres que forman fallas. Sin embargo, estas fallas, de fuerte actividad sísmica, no afectan a otras fallas europeas: "Si hubiese un terremoto en las próximas horas en Grecia, serían otros procesos distintos. No es esperable pues un fenómeno en cascada", dice Pérez.

¿Pueden darse otros grandes terremotos en Europa?

Las principales Fallas Europeas pueden verse a través del visor del Proyecto Europeo SHARE o de los diferentes servicios geológicos de los países europeos. Hay multitud de fallas activas en Europa con capacidad de generar terremotos destructivos. "Principalmente se localizan en Grecia e Italia. Sin embargo, pueden aparecer terremotos de magnitud importante en todo el arco mediterráneo, incluyendo a España, por supuesto", explica Pérez.

Cuidado con el 'triggering'

Según todos los expertos, monitorizar la zona es una tarea prioritaria para salvaguardar a la población superviviente y a los equipos de emergencia, ya que podría haber fenómenos de 'triggering' o disparo de fallas activas cercanas en al zona de afección.

De hecho ya se han producido réplicas en municipios de los alrededores: en Perugia se ha dado un seísmo de 4,3 grados y, a los 30 minutos, ha tenido lugar uno de 5,5 a diez kilómetros del premonitor. Pérez reconoce que estas réplicas son bastante fuertes, teniendo en cuenta el tamaño del sismo principal.

¿Dónde hay más peligro en España?

La falla de Alhama o la de Crevillente, la del Bajo Segura o la del Mazarrón… hay varias zonas activas actualmente que podrían generar problemas. Sin embargo, el foco más importante se encuentra en Andalucía y Murcia: "La zona sur y sudeste de España son las más activas sísmicamente", recalca Pérez.

Aunque ninguno suele ser de muy alta magnitud, lo cierto es que "podrían aparecer terremotos más destructivos de los hasta ahora vividos, incluso, en otras fallas de España como en los Pirineos y Galicia".

Al este por la placa de Eurasia y al sur por la placa africana

Las fallas no son las únicas causantes de los terremotos. La fricción entre placas tectónicas puede ser también el origen de estos temblores. España comparte con Italia las placas litosféricas de Eurasia y de África. Estas capas colindantes de tierra se juntan dos centímetros cada año desde hace milenios, lo que produce mayor sensibilidad en nuestro terreno: "Esto da lugar a fracturas en la corteza terrestre. Este proceso libera gran cantidad de energía", afirma Pérez.

¿Qué podemos hacer para prevenirlos?

Italia, el país de los Alpes, los Apeninos y los grandes valles, es una zona con bastante movimiento de placas tectónicas y fallas activas. Va a seguir habiendo movimientos, como llevan produciéndose durante miles de años. Actuar en contra es imporsible, pero sí se puede mejorar las técnicas y herramientas de prevención. "Lo importante es que los geólogos estudiemos estas zonas para poder dar datos a los ingenieros y arquitectos y que ayuden a evitar desastres como estos. Nos falta mucha cultura de terremotos, a pesar de que la historia de la humanidad esta surcada por grandes terremotos y cataclismos desde su mismo comienzo", explica.