"El derecho no es una matemática y, por tanto, es materia opinable", ha sentenciado Constantino Méndez, en declaraciones a RNE, después de que el lehendakari, Patxi López, solicitara a las autoridades judiciales que estudien la posibilidad de que los dos piratas sean devueltos a su país de origen o a algún otro de la zona, como Kenia, para que sean juzgados allí.
Desde el jueves, el Gobierno vasco ha reunido a su propio gabinete de crisis, integrado también por miembros de los ministerios que tabajan en el secuestro. López se ha comprometido hoy a hacer "todo lo que esté en sus manos". Además, los alcaldes de los municipios de donde son los marineros vascos han pedido al Ejecutivo que "sea práctico" y que traslade a Kenia a los piratas.
Los secuestradores del pesquero Alakrana han amenazado con matar a los tres tripulantes, que han sido trasladados a tierra, si no se libera en tres días a los dos piratas detenidos en España, según el patrón del buque.
Tras reiterar lo que ya dijo el jueves la ministra de Defensa, Carme Chacón, que estos tres tripulantes "están bien y perfectamente localizados", Méndez ha insistido en que el Gobierno es "consciente" de que, con esta acción, los secuestradores pretenden "crear dramatismo y confusión". Hay que actuar "con mucha prudencia y mucha firmeza".
El secretario de Estado ha dicho que ante un secuestro, "la única hipótesis principal es la extorsión y, por tanto, el interés de los secuestradores no es más que obtener su botín". Con estas palabras ha descartado que el principal escollo de la negociación sea la liberación de los secuestradores detenidos en España."Es un interés económico, esta es la premisa que debemos tener presente. Con independencia de ello, tenemos que ser, insisto, prudentes, y cualquier supuesto lo tenemos que analizar", ha continuado.
El secretario de Estado tampoco ha descartado una intervención militar para acabar con el secuestro porque "no debemos descartar nada" y, tras recordar que dos fragatas vigilan el Alakrana, ha señalado que, "obviamente, el dispositivo militar tiene todas sus operaciones estudiadas y calculadas por si fuera necesario llegar a utilizarlas".
La Oposición
La secretaria general del PP ha pedido al Gobierno que "haga todo lo que tenga que hacer" para que la tripulación del Alakrana vuelva "sana y salva a nuestro país" y que muestre su solidaridad y apoyo a las familias.
La número dos del PP cree que el Gobierno "se ha equivocado desde el principio, y ha hecho las cosas como no se tenían que hacer. También ha exigido que se haga todo lo necesario para que algo así no vuelva a ocurrir.
El vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, igualmente cree que el Gobierno ha dejado pasar el tiempo tras el secuestro del pesquero vasco "sólo por desidia" y no porque ello "beneficiaba" a la solución que el Ejecutivo iba a adoptar en la negociación con los piratas. González Pons ha dicho que el Ejecutivo "ha entretenido con el espectáculo de la edad del pirata detenido, mientras simplemente no estaba haciendo nada".
Antes estas críticas la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha acusado al PP de "deslealtad institucional" ante la crisis del Alakrana y ha remitido al ámbito judicial la entrega de los dos piratas. Ha acusado a la oposición de mantener un comportamiento "penoso" y "lamentable".
Las familias en la Audiencia
El presidente de la Audiencia Nacional, Ángel Juanes, ha accedido a la petición de las familia y se reunirá con ellos el próximo martes a mediodía.
María Ángeles Jiménez, la mujer de uno de los tripulantes ha hecho hoy "responsable al Gobierno de la vida de nuestros maridos".
Silvia Alvés, otra de las esposas, ha hecho unas declaraciones similares. "El Gobierno nos sigue mintiendo, nos dijeron que no sabía quienes eran los marineros que habían bajado a tierra y si que lo sabían, no nos lo dijeron hasta las diez de la noche".
Con las familias se ha postulado la empresa armadora del buque que ha pedido a la Administración de Justicia la adopción de "medidas urgentes" para facilitar la "salida" de los dos detenidos en España.
EBP