ETA asesina a un empresario en Azpeitia

INFORMATIVOS TELECINCO 03/12/2008 12:26

La víctima pertenecía al consejo de administración de la empresa Altuna y Uría que participa en la construcción de la 'Y' ferroviaria vasca. Dos etarras han disparado a Uría, que ha recibido dos impactos de bala, uno en el pecho y otro en la cabeza, cuando se encontraba en un aparcamiento junto al restaurante 'Kiruri', donde acudía diariamente a jugar a las cartas. La víctima no acostumbraba a llevar escolta.

El constructor Ignacio Uria Mendizabal es la cuarta víctima mortal de ETA de 2008 y la primera que se produce tras la detención el pasado 17 de noviembre del considerado máximo dirigente de la banda, Garikoitz Aspiazu, "Txeroki".

Robaron el coche minutos antes del asesinato

Los tres terroristas que participaron en el asesinto robaron un coche en el Alto de Itziar, en el municipio de Deba, y retuvieron a su conductor. Emplearon el vehículo para cometer el atentado y los dos que participaron en el tiroteo regresaron a este mismo alto después.

TAV, objetivo de ETA

La empresa de Uría participa en la construcción de la 'Y' ferroviaria vasca, que en los útimos años se ha convertido en uno de los objetivos prioritarios de ETA. Los terroristas han atentado en repetidas ocasiones contra empresas adjudicatarias de las obras.

Ignacio Uria, natural de Azpeitia, es el empresario número 41 que mata ETA y el primero asesinado desde el año 2000. Es miembro del Consejo de Administración de Altuna y Uria. Estaba casado y tenía cinco hijos. Han sido los propios trabajadores del restaurante quienes han avisado a la esposa del fallecido. Desde el Restaurante han dicho que era "un amigo al igual que toda su familia". Uría iba casi a diario a Kiruri y siempre aparcaba en el mismo lugar, entre su empresa y el restaurante. Vivía muy cerca, en un caserío. El conductor del coche fue atado a un árbol y abandonado en el lugar, y los terroristas se desplazaron a la localidad guipuzcoana para cometer el crimen.

Los etarras han empleado el mismo 'modus operandi' que cuando asesinaron al concejal socialista Isaías Carrasco en Mondragón.

Altuna y Uría había sido saboteada en marzo de 2007. A algunos de sus camiones les pincharon las rueda y les taponaron el tubo de escape. Además, en la sede aparecieron pintadas.