Lugo admite que podría corregir rumbos tras la retirada de su principal aliado

AGENCIA EFE 01/07/2009 18:50

"Podemos discutir nuestras agendas abiertamente. Podemos corregir rumbos inclusive cuando ello lo 'amerite'", pero no cambiaremos nuestra opción porque sería traicionar las urnas que consagraron la opción de la voluntad popular (en los comicios generales) del 20 de abril de 2008", dijo Lugo en su alocución ante el Congreso.

El mandatario se expresó en esos términos durante la presentación de su primer informe de gestión tras su llegada a la presidencia, el 15 de agosto de 2008, y en aparente alusión a la decisión adoptada la noche del martes por el oficialista Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA).

El directorio de ese partido, de centro derecha, resolvió la retirada de la Alianza Patriótica para el Cambio (APC), coalición de amplio espectro ideológico que llevó a Lugo al Gobierno, aunque destacó que seguirá cooperando de manera activa con el jefe de Estado hasta que la convención convocada para el 2 de agosto próximo ratifique o rechace la decisión.

Por su parte, el jefe de Gabinete de la Presidencia, Miguel López Perito, recordó que el PLRA representa la principal fuerza dentro de la Alianza y que en caso de que confirme su retirada "se va a replantear el escenario político".

"Creo que es un problema no central, que de alguna manera habría que hacer el esfuerzo de reconsiderar esa medida, espero que prime la racionalidad, la calma, la ecuanimidad para poder medir las consecuencias y que esto no traiga el debilitamiento al Gobierno", opinó el jefe de Gabinete.

Añadió que "la APC es un espacio sumamente importante, es una caja de resonancia de las medidas gubernamentales, ya que a través de contactos con grupos organizados sabemos qué está pensando la ciudadanía".

La decisión del PLRA es el epílogo de una serie de desavenencias con Lugo, que se agudizaron la semana pasada tras la elección de las nuevas autoridades del Congreso, que hoy asumieron en sus funciones para un mandato de un año.

Los liberales aportaron el 80 por ciento de los votos conquistados por Lugo en los comicios del año pasado en una fórmula que integró con el vicepresidente del país, Federico Franco, líder de uno de los movimientos internos del PLRA.

Franco también arrastra divergencias con Lugo desde antes de la asunción de éste al poder porque el jefe de Estado ha favorecido a referentes de otras fracciones internas en la designación de sus principales colaboradores.

En la Cámara de Diputados el PLRA impuso la reelección de Salyn Buzárquis como presidente, en alianza con el Partido Unión Nacional de Ciudadanos Éticos (UNACE), segunda fuerza de la oposición y liderado por el general retirado Lino Oviedo.

Pero, en el Senado el acuerdo liberal con UNACE fue frustrado con la elección de Miguel Carrizosa, del derechista y minoritario Partido Patria Querida (PPQ), luego de unas negociaciones de última hora de legisladores afines a Lugo y tres liberales con el Partido Colorado.

Durante 61 años el Partido Colorado se mantuvo en el poder, hasta que Lugo ganó las elecciones.

La APC también está formada por el Partido Democrático Progresista (PDP), el Partido País Solidario (PPS), ambos socialistas, y el movimiento Popular Tekojojá, de izquierda, así como por una treintena de organizaciones extraparlamentarias, en su mayoría de izquierda.