"¿Tenemos un ejército fuerte, defensas aéreas o misiles de rango medio para conseguir estar equilibrados con el Ejército israelí?", se preguntó Nasrala en un discurso celebrado en el valle oriental de la Bekaa con motivo de las elecciones parlamentarias previstas para el 7 de junio.
"La respuesta es no", dijo el principal representante de la oposición libanesa antes de insistir en que los gobiernos de su país nunca habían solicitado armamento a Irán "para hacer frente a Israel".
En este sentido, prometió que si la alianza opositora se hace con el poder "Hizbulá adoptará un programa para reforzar el Ejército libanesa para ser capaz de defender Líbano".
"Irán no puede venir y ofreceros (dirigiéndose al Gobierno) armamento sofisticado para el Ejército libanés porque entonces diríais que quiere empujarnos a la guerra con Israel", dijo el líder chií.
El dirigente de Hizbulá insistió en que en caso de que Líbano solicitara armas a Irán, el máximo dirigente de este Estado, Ali Jamenei aceptaría sin imponer condiciones.
Asimismo, subrayó que Estados Unidos y otros estados occidentales nunca proporcionarán armamento desarrollado a Líbano "no porque estas armas puedan caer en manos de la resistencia (Hizbulá), sino porque serían utilizadas contra Israel".
Por otro lado, Nasrala acusó a ciertos elementos del Ejecutivo libanés, que no identificó, de querer acabar con Hizbulá y de que su milicia deponga las armas.
También insistió en que si su coalición gana las elecciones, desea la formación de un gobierno de unidad nacional.