La OEA celebra una asamblea por la no violencia en un país que se desangra a diario

AGENCIA EFE 30/05/2009 16:40

El lema de la asamblea, "la no violencia", fue escogido por el presidente hondureño, Manuel Zelaya, que ahora se enfrenta a diversos sectores sociales de su país, por una iniciativa suya orientada a instalar una Asamblea Nacional Constituyente para reformar la actual Carta Magna.

Honduras, un país con 7,3 millones de habitantes, de los que más del 60 por ciento vive entre la pobreza y la miseria, también figura entre las naciones latinoamericanas con más violencia, aún cuando no vive una guerra interna.

En vísperas de la XXXIX Asamblea General de la OEA, que se celebrará en San Pedro Sula, en el norte del país, Zelaya resaltó que en este encuentro Honduras propondrá que "la no violencia" sea una política de Estado y abogará por el fin de las guerras y de la carrera armamentista en el mundo.

La iniciativa de Zelaya contrasta con lo que ocurre internamente en Honduras, donde la violencia y el crimen organizado se cobran un promedio de diez muertes diarias y el narcotráfico se hace sentir cada vez con más fuerza.

En lo que va de año, por ejemplo, han caído al menos diez avionetas con matricula venezolana que llevaban cargamentos de cocaína y dólares, según informes oficiales.

En algunos casos la Policía se ha incautado de la droga transportada en las avionetas, pero en otros llegó tarde al lugar en que cayeron los aparatos y éstos habían sido quemados por sus tripulantes para no dejar huellas.

Con la colaboración de Estados Unidos, las autoridades locales se han incautado este año de más de 8.000 kilos de cocaína.

En la XXXIX Asamblea General de la OEA también se abordarán cuestiones como el fortalecimiento de la democracia, la seguridad, los derechos humanos, la justicia y la familia.

En lo que respecta al fortalecimiento de la democracia, ahora los hondureños se encuentran enfrentados entre los que apoyan la instalación de una Asamblea Nacional Constituyente que reforme la Constitución, y los que se oponen a ello, por considerar que con ella Zelaya lo que pretende es el continuismo.

La actual Constitución no permite la reelección presidencial bajo ninguna circunstancia.

Zelaya impulsa una encuesta de opinión que realizará el Instituto Nacional de Estadísticas para saber si los hondureños están de acuerdo con que el 29 de noviembre, con motivo de las elecciones generales, se instale una cuarta urna para que se pronuncien sobre el establecimiento de una Asamblea Nacional Constituyente que luego reforme la Constitución.

Las otras urnas son para elegir a un presidente, tres vicepresidentes, 128 diputados al Parlamento nacional, 20 al Parlamento Centroamericano y a los miembros de 298 corporaciones municipales.

Con esa iniciativa, Zelaya ha desafiado al Ministerio Público, la Procuraduría General del Estado, el Tribunal Supremo Electoral y los tribunales de justicia, que han expresado que la encuesta encargada al Instituto Nacional de Estadísticas (INE) es ilegal.

Analistas locales y un sector de la prensa, entre otros, han reiterado esta semana que la decisión del presidente puede llevar al país a una confrontación mayor y desembocar en violencia.

El presidente, quien ha reiterado que no busca el continuismo, destacó el jueves que la encuesta a favor de la cuarta urna, campaña en la que se están gastando millones, no la detiene nadie.

Además, ordenó a las Fuerzas Armadas que brinden todo el apoyo necesario al INE para que lleve a cabo la encuesta.

También dijo que se siente muy complacido porque su país será sede de la XXXIX Asamblea General de la OEA, y que el evento, bajo el lema de "la no violencia", unirá la próxima semana a los pueblos de América.