La entrevista, según el programa de la Presidencia angoleña, se celebrará en el Palacio de la Ciudad Alta, donde se le rendirán a Castro honores militares, y las conversaciones versarán sobre las relaciones bilaterales y la situación política internacional.
Los objetivos de la visita son fortalecer los vínculos y ampliar la cooperación en diversos campos entre ambos países, aliados históricos desde que iniciaron sus relaciones hace 33 años, según las autoridades angoleñas.
Desde el Palacio Presidencial, el gobernante cubano se trasladará a la Asamblea Nacional, donde lo recibirá el jefe del legislativo angoleño, Fernando Dias dos Santos, y pronunciará un discurso en una sesión solemne de la Cámara.
Posteriormente, depositará una corona de flores en el monumento a Agostinho Neto, primer presidente de la Angola independiente, tras la victoria en 1976 del régimen del gobernante Movimiento Popular de Liberación de Angola (MPLA), de tendencia marxista, que aún sigue en el poder encabezado por Dos Santos.
El dirigente cubano se trasladará más tarde al cementerio del Alto de las Cruces, para rendir homenaje al comandante Raúl Díaz Argüelles, uno de los primeros combatientes cubanos muertos en la guerra de Angola, donde las tropas del país caribeño apoyaron al MPLA desde 1975 a 1991.
Más tarde, se reunirá con diversas autoridades, entre ellas el primer ministro, António Paulo Kassoma, y dirigentes del MPLA, y cerrará la jornada con una cena oficial que le ofrece Dos Santos.
El viernes Castro lo dedicará a visitar instalaciones industriales y de servicios y se reunirá con la comunidad cubana residente en Angola, antes de salir en la mañana del sábado con destino a Argelia, el otro aliado histórico de Cuba en África.
Esta es la segunda visita a Angola de un presidente de Cuba, después de la realizada en 1976 por Fidel Castro, mientras que los presidentes angoleños, Neto y Dos Santos, visitaron Cuba en 1976 y 2007, respectivamente.