El ministro de Sanidad y Asuntos Sociales, Alfonso Alonso, cree que una de los motivos de la caída electoral del PP en autonómicas y municipales es que ha sido "lento" al decidir "determinadas renovaciones" de líderes y actitudes que debieron afrontar antes "en algunas partes", aunque no ha querido precisar dónde: "Señalar con el dedo es de muy mala educación".
"Un partido político es un instrumento al servicio de la sociedad, no de un líder determinado", ha dicho el ministro, que este lunes ha inaugurado los Desayunos Socio-Sanitarios de Europa Press. "En algunas partes, hemos sido más lentos al entender cuál es la misión de un partido al servicio de los ciudadanos", ha añadido.
Alonso ha situado este motivo como una de las causas de la pérdida de votos y poder que ha sufrido su partido en las últimas elecciones. Ha sumado también el castigo en las urnas por las medidas contra la crisis y por los casos de corrupción, que ha insistido en situar en el pasado aunque se hayan conocido en esta legislatura. "Este es un tiempo también de curación", ha defendido.
Esa renovación, ha explicado el ministro, alcanza a las personas, pero también a las ideas y a las actitudes, pero ha excluido de esta reflexión a Mariano Rajoy. "Le veo más renovado que nunca, con muchas ganas. Tiene una responsabilidad y la tiene que ejercer ahora", ha defendido, y ha explicado que el presidente del Gobierno a su juicio ofrece estabilidad y un proyecto de España común. "Eso es Mariano Rajoy, necesitamos un poco más de Mariano Rajoy", ha dicho.
Alfonso Alonso ha sido preguntado también por la reacción de algunos dirigentes territoriales tras las elecciones, como Juan Vicente Herrera en Castilla y León, que amagó con retirarse tras no conseguir mayoría absoluta aunque finalmente será presidente con apoyo de Ciudadanos.
"Yo lo entiendo todo. A veces tras unas elecciones se produce cierta tensión en el ánimo. Uno puede irse unos días al Camino de Santiago, relajarse, mirar el tema y, con más perspectiva, se habla", ha bromeado.
LA RADICALIDAD DEL PSOE
Como el resto del Gobierno, Alonso ha cargado contra el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, por liderar un partido que se ha radicalizado, a su juicio, "por la obsesión de que no hubiera gobiernos del PP", una alternativa política "que no tiene ningun programa, que produce inquietud y que dificilmente puede ofrecer soluciones de futuro".
"Más alla de la alegría del nombramiento, alegría que les produce el hecho de haber echado a otro, más allá de eso el ejercicio de la política es mucho más serio", les ha dicho Alonso a los nuevos gestores de ayuntamientos y Comunidades Autónomas.
Preguntado por la posibilidad de que el Gobierno busque una reforma electoral para dar gobiernos a los que ganan las elecciones y evitar alternativas de coalición, el ministro ha dado su opinión: "Las reformas electorales se tienen que hacer al principio de la legislatura y por acuerdo, eso es lo que yo creo".