Bolinaga recibe la visita del etarra Jesús María Zabarte, el 'Carnicero de Mondragón', condenado por 17 asesinatos

EUROPA PRESS 04/04/2014 13:20

El etarra Josu Uribetxeberria, carcelero de Ortega Lara y condenado por asesinar a tres guardias civiles e investigado por matar a otro ha recibido este viernes la visita de apoyo del terrorista Jesús María Zabarte, condenado por 17 asesinatos y en libertad desde el pasado noviembre tras la derogación de la doctrina Parot.

Zabarte conocido como el 'Carnicero de Mondragón' fue condenado a 615 años acusado de 20 atentados y 17 asesinatos, y tenía previsto salir en el 2015. Ambos han mantenido un encuentro de media en el domicilio de Mondragón (Guipúzcoa) en el que Bolinaga se encuentra desde ayer en arresto domiciliario con la única posibilidad de salir para recibir tratamiento médico en el hospital.

Además, se ha acercado hasta la vivienda en la que reside el recluso uno de los amigos que este pasado jueves le acompañó hasta el Juzgado de Bergara para prestar declaración por videoconferencia por la acusación de haber participado en el asesinato del cabo de la Guardia Civil Antonio Ramos.

Tras escuchar el testimonio de Uribetxeberria este jueves, el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ordenó su prisión incondicional y comunicada --que deberá cumplir en su domicilio debido a su grave estado de salud en el que se encuentra al sufrir un cáncer terminal-- al considerarle autor material de los disparos que en julio de 1986 acabaron con la vida de un agente del Instituto Armado.

A primera hora de la mañana de este viernes, un coche de la Ertzaintza se encontraba apostado ante la casa en la que vive para constatar el cumplimiento de la resolución judicial. Hasta la vivienda se ha acercado, sobre las once menos cuarto de la mañana, el expreso de ETA Jesús María Zabarte, también en libertad desde el 20 de noviembre del pasado año, como consecuencia de la aplicación de la sentencia de Estrasburgo sobre la doctrina Parot.

Uribetxeberria Bolinaga sólo podrá salir de su casa de Mondragón durante el tiempo que necesite para el tratamiento del cáncer al que está siendo sometido y siempre bajo vigilancia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.