Así lo ha expresado a la prensa en la Fundación para la Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo (ANAR), donde ha lamentado que este acto "lleve cierta equidistancia entre terroristas y víctimas". "Desde el punto de vista ético es intolerable y desde el punto vista democrático es absolutamente impropio", ha añadido.
Así pues, ha insistido en que es una "paradoja" en una sociedad democrática que Otegi --"una persona condenada por los delitos más graves", ha apuntado--, "pueda acabar siendo representante de los ciudadanos". Y, ha reiterado que es "contradictorio" que algunos "representantes de los ciudadanos quieran dar acogida o cobijo a este tipo de planteamientos" y a una persona que "simboliza lo peor de nuestro pasado reciente: el terrorismo".
Por ello, el responsable de Justicia ha recalcado en que los "demócratas" tienen que estar "siempre del lado del Estado de Derecho y de las víctimas por la barbarie que han vivido". "Que ahora los causantes de esa circunstancia puedan aparecer como iguales a los demás es intolerable", ha remachado.