La crisis abierta entre la dirección federal de Izquierda Unida y su federación de Madrid quedará zanjada esté domingo en el Comité Político Federal que se celebrará en Madrid y el que se pretende cerrar definitivamente un conflicto que lleva enquistado desde hace meses.
Una de las soluciones que está sobre la mesa es la 'desfederación' de IUCM, lo que en la práctica supondría 'romper' todos los lazos con el partido existente en la Comunidad de Madrid, como ya sucedió en el año 2011 con Ezker Batua en el País Vasco.
Pero esta medida conllevaría además de forma automática la baja como afiliados de IU de todos los militantes de IUCM, que si quieren seguir formando parte del partido tendrán que volver a afiliarse directamente a IU Federal.
Este hecho, que lo decidirán los 180 miembros del Consejo Político, provocaría situaciones curiosas, como la pérdida de la condición de militante de su coordinador federal, Cayo Lara, que tendría que gestionar de nuevo su alta como afiliado.
Y en esta situación se encontrarían tambien los otros 5.000 militantes con los que cuenta la organización en Madrid, según datos de la que era la dirección regional hasta la pasada semana, cuando presentó su dimisión para dar paso a una gestora que dirigirá la organización hasta una Asamblea extraordinaria.
Todos ellos tendrían que gestionar de nuevo su acta como militantes directamente con IU Federal, algo que desde la dirección federal creen que no supondría ningún problema porque su gestión sería sencilla en las asambleas locales, que se reúnen habitualmente.
Además, celebran que permitiría la vuelta a IU de muchos militantes que abandonaron la organización durante los últimos meses por discrepancias con la dirección regional, como el equipo de Mauricio Valiente, que salió de IU para integrarse en Ahora Madrid, el partido instrumental encabezado por Manuela Carmena y apoyado también por Podemos.
Sin embargo, otros militantes de IUCM avisan de que, si finalmente se da este paso, IU se arriesga a perder muchos militantes por el camino. A los que no quieran afiliarse por el conflicto con la dirección federal se suman quienes no tienen una militancia activa y, simplemente por pasividad, no vuelvan a rellenar los trámites de afiliación.
Sin embargo, la decisión aún no está cerrada y el secretario de Organización de IU Federal, Adolfo Barrena, está manteniendo múltiples reuniones durante esta semana para articular la mejor fórmula que dé una solución al conflicto con Madrid.
La pasada semana, la Presidencia Federal de IU encomendó a Barrena la presentación este domingo de una propuesta que, de forma "urgente", cierre ya está crisis que lleva meses abierta y abrir paso a "una nueva etapa en la historia de IU en Madrid".
BATALLA LEGAL POR LAS SIGLAS Y SITUACIÓN INCIERTA DE LOS CONCEJALES
Pero además, la 'desfederación' de esta parte de Izquierda Unida tendría muchas más consecuencias. IUCM es una formación política con independencia jurídica y NIF propio, por lo que en caso de dejar de formar parte de IU seguiría funcionando de forma autónoma como organización independiente.
Después, comenzaría una previsible batalla legal por la utilización de las siglas de Izquierda Unida en la Comunidad de Madrid. El primer conflicto podría surgir en las elecciones generales, cuando esté en juego cuál de las dos organizaciones pueda presentar una candidatura con esta denominación.
También sería peculiar la situación de los 110 concejales electos el pasado 24 de mayo en diferentes municipios de la Comunidad de Madrid. Estos podrían optar por seguir los cuatro años de legislatura bajo esta denominación. Otra opción sería darse de alta en IU Federal, lo que tendría el riesgo de que IUCM les denunciase como tránsfugas.