Carromero fue condenado en el país caribeño por el accidente de tráfico en el que fallecieron el 22 de julio de 2012 los disidentes Oswaldo Payá y Harold Cepero. Tanto la Fiscalía como la Audiencia Nacional se han opuesto a la concesión del indulto, una medida de gracia que sí reclaman los familiares de los disidentes que fallecieron en el accidente. Tras ser condenado en Cuba, Carromero solicitó su traslado a España, donde reclamó el tercer grado penitenciario, que le fue concedido 13 días después.
De Luis, muy comprometido con la labor de la disidencia cubana, ha recordado, en declaraciones a Europa Press, que Carromero pudo ser trasladado a España porque aceptó el proceso y la condena que se le impuso, tal y como establece el tratado de extradición vigente con Cuba, y lo que implica ciertos compromisos por parte del Estado español.
Por eso considera que el Gobierno debe actuar "con rigor y seriedad" y no poner en entredicho la aplicación de ese acuerdo porque eso podría llevar a otros países a considerar que los tratados se usan como un "coladero" y negarse a extraditar a otros condenados a España. "Si España pone ahora todo el proceso en cuestión, la política del Gobierno quedaría en entredicho", ha apuntado.