Ante sendos escritos que solicitan autorización para vender el palacete que el matrimonio posee en el barrio barcelonés de Pedralbes, el juez no ha decidido nada aún.
Precisamente, hace apenas una semana, cuando se apuntaba a la posible venta del inmueble, el juez instructor del caso Nóos, José Castro, señalaba que la Infanta y su marido aún no le habían pedido autorización para vender el palacete. "A mí todavía no me han pedido nada", apuntaba a su llegada a los Juzgados de Vía Alemania de Palma.
Los Duques compraron la casa, de lujo, por casi seis millones de euros y se gastaron en reformas cuatro. Aunque pedían 10 millones por la venta, finalmente el acuerdo alcanzado es de seis. Con ese dinero no cubren ni la mitad de la fianza impuesta a la pareja por el juez.