El exdirector financiero de Emarsa dice que en la empresa "casi todos eran enchufados del PP"

EUROPA PRESS 09/01/2014 16:57

Así lo ha puesto de manifiesto Arnal en su declaración como imputado ante el titular del juzgado de Instrucción número 15 de Valencia, que investiga un presunto fraude de 25 millones de euros en la gestión de la depuradora de Pinedo.

En su primer interrogatorio, afirmó que el exgerente de Emarsa Esteban Cuesta; el expresidente de la Entidad Metropolitana de Servicios Hidráulicos (Emshi) Enrique Crespo; el exgerente de Epsar José Juan Morenilla, y el ex director de explotación de esta última entidad Ignacio Bernácer, ingeniaron una estructura para repartirse cada mes 180.000 euros por la gestión de los lodos.

En su segunda declaración, ha asegurado que cuando llegó al cargo Esteban Cuesta le quiso "eliminar para colocar a personas de su confianza", y ha indicado que existía "mucho recelo" hacia él en los "mandatarios políticos" de Emarsa, en la que "casi todos eran unos enchufados del Partido Popular".

"Eran los hombres del Partido Popular los destinados a ocupar áreas estratégicas que se tenían que controlar en toda la empresa pública", ha manifestado Arnal, quien ha asegurado que nunca ha tenido carné de militante de ningún partido.

Enrique Arnal, preguntado por cómo se podía organizar la empresa siguiendo las instrucciones de un partido, ha respondido que existían "negociados o grupos de poder donde el común denominador era la omnipresencia del Partido Popular".

Al respecto, ha señalado que, entre otros, "un negociado era Estaban Cuesta, el presidente, Morenilla, Bernácer y conseller de turno" y otro lo formaban "Estaban Cuesta, el presidente, la Emshi y el Ayuntamiento de Valencia".

En esta línea, ha asegurado que existían "grupos mucho más potentes ajenos a la empresa", entre los que ha citado "el Ayuntamiento de Valencia, Emshi, Epsar, Consejería, Partido Popular y grupos privados de poder empresarial como Aguas de Valencia".

En otro momento de su declaración, ha indicado que "según Esteban Cuesta, entre los administrativos había espías de familias dentro del PP y afines a los sindicatos", por lo que "según qué cosas no debían trascender para no ser filtradas al partido y a la prensa", ha apostillado.

Según Arnal, ha liquidación de Emarsa fue "una hoja de ruta" que, tal y como ha indicado, fue "preconcebida en la etapa de Silvestre Senent y reforzada con Enrique Crespo y en complicidad con el Ayuntamiento de Valencia".

Asimismo, ha asegurado que con Senent "hubo muchas incorporaciones digitales como siempre de personal del PP", y ha añadido que una vez al mes "comía con Esteban Cuesta, Ignacio Martínez, Santos Peral y Sebastián García".

COMIDAS PARA PEDIR MÁS FINANCIACIÓN

Del mismo modo, ha dicho que también se celebraban otras comidas "con mucha frecuencia" entre "Esteban Cuesta, Enrique Crespo, Morenilla y Bernacer". "Estaban Cuesta me decía que quedaba con ellos para pedir más financiación", ha añadido al respecto.

Por otra parte, el exdirector financiero de Emarsa ha negado haber cobrado sobresueldos, ya que ha asegurado que todo lo QUE percibió fue "por transferencia bancaria" y de forma "totalmente transparente".

"PADRINOS POLÍTICOS"

Arnal ha defendido que aunque tenía "mando organizacional", carecía de "mando político" que, según ha resaltado, "era el que verdaderamente revestía poder, relevancia y capacidad para hacer supuestas maniobras fraudulentas". "Ese tipo de mando está reservado a las personas afiliadas al PP y eso era condición sine qua non, pues rendían cuentas a sus padrinos políticos que les había colocado digitalmente".