Serra declaró hace un mes acompañado de su abogado en la comandancia de la Guardia Civil de Travessera de Gràcia en Barcelona, por una quincena de operaciones sospechosas entre 2005 y 2008 que supuestamente causaron un perjuicio a la entidad de unos 900 millones de euros, según ha publicado este viernes 'El Mundo'.
Tras haber recibido los informes de la Guardia Civil, el fiscal Fernando Maldonado deberá decidir, a partir de esta información, si ve indicios para presentar una querella en los juzgados contra Serra y la antigua cúpula de la entidad; todo ello, al margen de que el también exministro está pendiente de juicio por los presuntos sobresueldos de la entidad en plena época de crisis.