En libertad con cargos una nueva detenida por encubrir el tiroteo donde murió una menor en Sevilla

EUROPA PRESS 18/09/2013 15:25

En este sentido, las mismas fuentes han precisado que, tras ser detenida en Sevilla por la Policía, esta mujer de 35 años, identificada como S.G.S., pasó en la tarde de este martes a disposición del Juzgado de Instrucción número 16, que tras tomarle declaración la dejó en libertad con cargos imputada por un presunto delito de encubrimiento de asesinato.

Tras ello, el Juzgado se ha inhibido en favor del Juzgado de Instrucción número 20 de Sevilla, que es el que investiga un caso en el que ya hay imputadas 12 personas, diez de las cuales han ingresado en prisión provisional.

Las fuentes consultadas por Europa Press han señalado que, en su declaración, la detenida negó cualquier relación con el clan de los Perla, al que pertenecen la mayoría de los presuntos implicados en este tiroteo mortal ocurrido en Las Tres Mil Viviendas.

En el sumario, constan "numerosas" llamadas telefónicas a la detenida de Antonio G., alias 'El Coleta' --detenido y que admitió haber disparado contra el clan de los Mariano--, la primera de las cuales la recibió apenas una hora después del tiroteo, cuando 'El Coleta' ya había huido del lugar en compañía de la mayoría de los imputados

En estas llamadas, 'El Coleta' le instaba "a quitar todo lo gordo" de sus viviendas del Polígono Sur, aunque la detenida ha asegurado que lo "gordo" no era droga sino oro, añadiendo además que finalmente no pudo entrar en dichos inmuebles.

La detención de esta mujer se produce después de que, el pasado viernes, la Policía Nacional detuviera en Mérida a un hombre de 41 años de edad, identificado como Gregorio B.H. y perteneciente al clan de los Perla, por haber participado supuestamente de manera "activa" en el tiroteo. Tras pasar a disposición judicial, fue enviado a prisión.

LEVANTAMIENTO DEL SECRETO

Una vez practicada la detención de este inculpado, que, como el resto de imputados, huyó tras participar supuestamente en el tiroteo, el Juzgado de Instrucción número 20 de Sevilla decidió levantar el secreto de sumario y dio traslado a los abogados personados de un pendrive con todas las actuaciones desarrolladas.

El levantamiento del secreto, que había sido solicitado por el abogado de los encarcelados, se produjo después de que, el pasado día 3 de septiembre, declarasen ante la juez los padres de la menor, quienes ratificaron lo dicho en sede policial, como es que ellos no eran el objetivo de dicho tiroteo y que por tanto fue un "error".

El padre de la menor ya negó públicamente cualquier tipo de implicación delictiva que pudiera haber ocasionado un ajuste de cuentas por parte del llamado clan de los Perla, pues "no he estado detenido ni he tenido armas en mi vida". "Me han destrozado la vida por completo, me han quitado la luz de mis ojos, no me la pueden devolver", apostilló.

DETENIDOS

Así, relató los hechos explicando que en el momento en que todo sucedió, al darse cuenta de los disparos, "me tiré para mi niña, que estaba en el sofá, para cogerla y llevarla al suelo". "Al levantarme me dieron: cuando miré a mi mujer vi que también estaba sangrando, con mi hijo de dos años, y en el suelo ya estaba mi niña", aseveró.

Tras ser detenidos en Mijas (Málaga), la juez envió a prisión a nueve de los diez detenidos inicialmente, pertenecientes al clan de los Perla, por los presuntos delitos de homicidio, contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, encubrimiento y amenazas.

A estos detenidos, que abandonaron el Polígono Sur tras el suceso para refugiarse primero en Hinojos (Huelva) y luego en una urbanización de Calahonda, en el término municipal de Mijas, se les incautaron varias armas, además de más de un kilo de una sustancia que aparentaba ser cocaína, entre 150.000 y 300.000 euros en efectivo y ocho kilos de oro.

LOS HECHOS

Los hechos se produjeron en la calle Orfebre Cayetano González, donde una menor de siete años recibió un tiro por causas que se intentan esclarecer, tras lo que fue trasladada inmediatamente al Hospital Virgen del Rocío, donde los facultativos no pudieron hacer nada por salvar su vida.

Inicialmente, la Policía Nacional barajó varias hipótesis como posibles detonantes del suceso, entre ellas un posible ajuste de cuentas con otro de los clanes dedicados al tráfico de droga en la zona --conocido como Los Mariano-- o una venganza debido a un secuestro previo de uno de los miembros de estas familias implicadas.

Los agentes encargados de la investigación mantuvieron inicialmente la tesis de que "la familia de la niña fallecida no tenía nada que ver en ello", por lo que los autores de los disparos, realizados desde la calle, "se habrían equivocado de casa", junto a la cual la Policía localizó más de una veintena de cartuchos de bala.