En la apertura de la VI Cumbre Progresista, en el balneario chileno de Viña del Mar, Lula también reclamó la reforma de los organismo multilaterales para dar voz y voto a los países en desarrollo.
"No podemos quedarnos prisioneros de paradigmas que se derribaron", advirtió el presidente brasileño, quien recalcó que los gobernantes progresistas del mundo deben encabezar este proceso transformador.
"Es una oportunidad que no debemos desperdiciar", dijo Lula, quien llamó la atención sobre el hecho de que la VI Cumbre de Líderes Progresistas se reúne por primera vez en América Latina y lo hace, además, "en un momento que no tiene precedentes" en los últimos años.
Lula le encargó al anfitrión de esa cumbre, el primer ministro británico, Gordon Brown, que apunte en la agenda de la reunión la discusión impostergable de la reforma de los mercados de futuros.
"No podemos dejar de discutir la situación de los mercados de futuros; si no lo hacemos, vamos a volver a la crisis del petróleo y de las materias primas agrícolas en las bolsas de todo el mundo", advirtió.
"El mundo entero está pagando el precio del fracaso de una aventura irresponsable de aquellos que transformaron la economía en un gigantesco casino", se lamentó.
Lula advirtió de que la difícil situación mundial exige de los gobernantes progresistas "una actitud coherente".
"Necesitamos reflexionar sobre lo que pasó y proponer alternativas", manifestó Lula, quien llamó la atención sobre el hecho de que la conferencia de Viña del Mar se celebra cinco días antes de la reunión del G-20 en la que las potencias económicas y países emergentes buscarán soluciones a la crisis financiera.
El mandatario brasileño enfatizó que la comunidad internacional espera de la reunión del G-20 respuestas para frenar el deterioro de la economía y la pérdida de empleo.
"No podemos correr el riesgo de aplazar soluciones profundas y estructurales; en caso contrario, la crisis echará a perder los adelantos que los países en desarrollo alcanzaron con tanto esfuerzo y sacrificio en la lucha contra la pobreza y la exclusión", señaló Lula, quien también alertó sobre el riesgo de retroceder a la trinchera del proteccionismo y la autarquía".
El gobernante brasileño se felicitó por el hecho de que en América Latina triunfen las tesis de la izquierda y casi toda la región esté gobernada por líderes que representan a "segmentos históricamente marginados". EFE
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