En una valoración realizada en la Misión de España en la ONU, ha recordado que el camino hacia el Consejo de Seguridad era "muy difícil" -- España competía con Nueza Zelanda y Turquía por dos vacantes-- pero no por ello se evitó librar esa batalla.
"En el futuro se presentarán batallas iguales o más ambiciosas. Esta carrera al Consejo de Seguridad espero sirva para fortalecer nuestra confianza. España es un gran país en el concierto internacional. Confiemos más en nosotros, vale la pena", ha arengado.
El ministro ha agradecido a todos los países que han votado por España (132 de un total de 193) su respaldo, un apoyo que España "no va a olvidar". Pero también ha felicitado a todos los que se han implicado en la campaña, desde los Reyes, al presidente del Gobierno, al equipo de funcionarios y diplomáticos dedicados a esta tarea y a muchos otros ("personalidades, fuerzas políticas de la oposición, empresas") que han luchado por este proyecto, algunos de ellos " en silencio". En definitiva, ha elogiado el trabajo desplegado por a todo un "ejército de ciudadanos al servicio de España", ha dicho
García-Margallo no ha olvidado citar a sus dos rivales en esta carrera, ninguno de los cuales, ha dicho, se lo puso fácil a España y ha esperado que la presencia de España en el Consejo facilite una "más intensa y mejor colaboración" entre todos los países que coincidirán con España en ese órgano.