Miembros de Podemos de Madrid desvinculan las dimisiones con la investidura y no ven fácil la salida de Luis Alegre

EUROPA PRESS 10/03/2016 13:30

En declaraciones a Europa Press, un dirigente de la formación ha señalado que las tensiones de los dimisionarios con el secretario regional, Luis Alegre, "vienen de lejos", tal y como revela la carta de cese publicada por el exsecretario de Organización, Emilio Delgado.

Eso sí, señala que "no tiene nada que ver" con posibles facciones de Íñigo Errejón o de Pablo Iglesias. "Aquí todos somos 'Iñigopablistas'", ha apunto. De hecho, el propio exsecretario de Organización pidió ayer en Twitter "que nadie manipule un conflicto regional para hacer daño".

"Se trata de una pérdida de confianza y conexión con el secretario regional por su falta de liderazgo", argumenta este político. Precisamente, tanto Delgado como el resto de los que han dejado su cargo en el Consejo Ciudadano llegaron al mismo de la mano de la candidatura oficialista 'Claro que Podemos' encabezada por Alegre, apoyado por Pablo Iglesias, que logró imponerse por poco margen frente al sector de Miguel Urbán.

Por otra parte, otro conocido miembro de Podemos lo ha explicado así: "Estamos construyendo una organización compleja y con muchos órganos en muy poco tiempo. Y muchos llegaron a las candidaturas sin apenas conocerse. Y con el tiempo han visto cómo trabajaban unos y otros. El estrés y el cansancio les ha pasado factura".

Además, ha destacado que el Consejo de la Comunidad de Madrid no tiene la entidad que pueda tener en otras comunidades históricas como Cataluña o Valencia. "Tiene dificultades para encontrar su rol. El peso político madrileño está en la Asamblea, en el Congreso y en el Senado y la tarea organizativa también en los Círculos", ha apuntado.

DAÑAR A PABLO IGLESIAS

Por otro lado, un miembro de Podemos cercano a Alegre ha explicado a Europa Press que se ha intentado hacer daño al partido y a Pablo Iglesias con estos "ataques" al secretario regional porque Alegre es una persona de confianza de Iglesias y es también miembro del Consejo Estatal.

También ha criticado "la falta de oportunidad" de estas dimisiones, habida cuenta de la situación de bloqueo que se vive con la investidura y de los conflictos internos de Podemos en otros lugares como Galicia y Cataluña. "En los chat dijeron que no querían dañar la imagen del partido, pero han conseguido todo lo contrario. La noticia hoy es Podemos y no la imputación de Ignacio González", ha manifestado este político.

Y consideran que las dimisiones "son fruto del estrés y el cansancio" de estos miembros. "No se entiende que quien acusa al secretario de no actuar, el que es miembro de Organización no haya actuado marcando sus líneas", ha añadido.

LO QUE DICE EL REGLAMENTO

Las diez dimisiones en el Consejo autonómico de Podemos no van a alterar, previsiblemente, su actividad. Hasta el lunes este órgano --que en principio estaba compuesto por 34 miembros más el secretario general-- lo formaban 31 miembros más el secretario, tras la marcha de tres personas hace meses por motivos personales.

Por tanto, son mayoría los que aún permanecen en él, por lo que hay quórum para convocar una nueva reunión del Consejo que, según las mismas fuentes, seguramente se fije, a petición del secretario general, la próxima semana. Si no fuera así existe la posibilidad, que ya se ha dado anteriormente, de que se convoque a petición del 25 por ciento de los miembros del Consejo regional.

En esta reunión se analizará lo ocurrido y se decidirá quién desempeñará las áreas organizativas que han quedado vacantes tras la dimisión de los diez miembros esta semana.

Los 'estatutos' de Podemos también contemplan la posibilidad de abrir un nuevo proceso de votación --el constitutivo fue hace un año-- destinado a revocar el mandato del secretario general o de cualquier integrante del Consejo Ciudadano a instancias del propio secretario o de una mayoría absoluta del Consejo Ciudadano.

Eso sí, el revocatorio sólo se podrá plantear una vez pase la mitad del mandato de tres años, es decir, en este caso a partir de septiembre de este año. Por tanto, la situación cambiaría sólo si dimiten muchos más miembros para que se configure una gestora, aseguran las fuentes consultadas.