Marqués fue detenido el miércoles, día 4, cuando se encontraba de viaje de trabajo en Madrid, por los presuntos delitos de prevaricación y cohecho relacionados con la investigación de la recalificación de unos terrenos protegidos por la UE en Aguilas, durante su etapa al frente de la consejería de Medio Ambiente.
El ex responsable regional fue trasladado, minutos antes de las ocho de la tarde, desde el Palacio de Justicia a la comisaría de Murcia, en cuyos calabozos volverá a pasar la noche a la espera de comparecer a las 9,00 horas de mañana ante el juez instructor del caso La Zerrichera, Antonio Alcázar.
El ex consejero, con el semblante tranquilo y sonriente, se negó a contestar a las preguntas sobre su estado que le realizaron los periodistas congregados a las puertas de Jefatura y, ya en las escaleras de acceso, giró la cabeza y contestó con un rotundo "sí, sí" cuando le preguntaron si abandonará el PP como otros compañeros de partido, en referencia a los alcaldes de Arganda y Pozuelo que dimitieron hoy.
Con barba de dos días, vestido de azul marino y tapando las esposas con un abrigo, Francisco Marqués cumplía hoy su segundo día de detención acusado de los delitos citados, derivados de la investigación que en 2007 abrió la fiscalía de Murcia tras las denuncias por delito medioambiental presentadas por grupos ecologistas y el PSOE.
El titular del juzgado de instrucción número Tres de Murcia, Antonio Alcázar, decidió aplazar a mañana la toma de declaración del ex consejero puesto que hoy ejerce el turno de guardia y tenía varios detenidos a raíz de una operación contra el tráfico de droga que se iba a prolongar varias horas más.
Se da la circunstancia de que Francisco Marqués se acogió ayer a su derecho a no declarar en comisaría, con lo que el instructor no dispone de ese informe policial previo a su paso por los juzgados que facilitaría la labor judicial.
Además, como se ha aplazado a las 9,00 horas de mañana la toma de declaración -el plazo de 72 horas de detención concluye al mediodía del sábado- la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional dispone de más tiempo para examinar el dinero en metálico y el material intervenido en las seis viviendas propiedad del acusado registradas desde el miércoles.
Francisco Marqués, consejero de Sanidad de Murcia entre 1999 y 2003, delegado del Gobierno en esta comunidad en 2004 y consejero de Ordenación del Territorio entre ese año y 2006, es propietario de seis viviendas en Murcia, Alicante, Águilas, Madrid y Valencia, y su nombre aparece también relacionado con varias sociedades mercantiles.
Marqués, que empezó su vida política muy joven como concejal del pueblo murciano de Fuente Álamo, había llegado al Palacio de Justicia de Murcia a las 16,30 horas procedente de la Jefatura Superior de Policía.
El abogado del ex consejero, el catedrático de derecho penal Jaime Peris, llegó a los juzgados alrededor de las siete de la tarde porque también asistía hoy, en Lorca, al ex director de la empresa municipal de limpieza Limusa, que fue detenido un día después de su despido por sendos delitos contra la hacienda pública y malversación.
El letrado, que ha criticado estos días las filtraciones a la prensa de la operación La Zerrichera, eludió hoy, en declaraciones a EFE, pronunciarse sobre si Francisco Marqués se acogerá mañana a su derecho a no declarar ante el juez.
Tras su paso durante casi 7 años por altas responsabilidades públicas en la Región de Murcia, Francisco Marqués, abandonó la administración pública para asumir la dirección general de la distribuidora farmacéutica Hefame, la mayor empresa de esta comunidad.
Según fuentes próximas a la investigación, Marqués, de profesión veterinario, fue detenido el miércoles en Madrid, donde también se encontraba su esposa M.J.G., otra imputada en el caso y previsiblemente declarará mañana ante el juez.
Las mismas fuentes indicaron que los cargos que se le atribuyen a Marqués derivan de su actuación como consejero de Medio Ambiente.
A raíz de las primeras indagaciones, la investigación se extendió al patrimonio del ex consejero, a quien le han intervenido, entre otros efectos, más de 45.000 euros en billetes de 500, hallados por los agentes de la policía en un pequeño escondite en el trastero de su vivienda habitual de Murcia, situada en la avenida de Europa.