El PP cree que los incidentes demuestran el "grave error" de autorizar la marcha laica por la Puerta del Sol

EUROPA PRESS 18/08/2011 11:12

El portavoz del Grupo Popular en la Asamblea de Madrid, Iñigo Henríquez de Luna, ha manifestado este jueves que la decisión de la delegada del Gobierno en Madrid, Dolores Carrión, de autorizar la manifestación 'antiPapa' pasando por la Puerta del Sol "fue un grave error" ya que, en su opinión, "se generó una situación de riesgo innecesaria".

A juicio de Henríquez de Luna, "la irresponsabilidad de Carrión favoreció los incidentes de una marcha intolerante, sectaria y radical que provocó unos enfrentamientos lamentables con la policía".

"Ya dijimos hace días que era un disparate permitir una marcha de estas características durante la celebración de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ)", ha dicho el líder popular justo antes de subrayar "el buen comportamiento" de los miles de jóvenes que han acudido a la capital para participar en este acontecimiento.

"Una vez más la ineptitud y falta de previsión de la delegada del Gobierno contribuyeron a proyectar una imagen penosa de nuestro país", ha comentado el portavoz, al tiempo que ha destacado el trabajo desempeñado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

SE EMPEÑAN A FAVORECER LOS ENFRENTAMIENTOS

"Salvo que lo que se pretenda sea crear un ambiente intencionado de tensión ideológica, no entiendo por qué algunos se afanan en favorecer los enfrentamientos entre ciudadanos", ha añadido el portavoz.

Henríquez de Luna ha recordado que "el derecho de manifestación tiene límites, entre ellos el respeto a la libertad de los demás, y nunca puede coartar otros derechos, en este caso el de la JMJ a celebrar la visita del Papa".

Por ello, y para respetar el derecho de todos, el portavoz popular ha concluido señalando que "la solución correcta habría sido autorizar la manifestación en otro momento, sin coincidir con la celebración de la JMJ, tal y como se hizo en la pasada Semana Santa con la denominada 'procesión atea', que se celebró en Lavapiés un mes después del Jueves Santo".