Rajoy anuncia que el PP buscará mejorar la deducción por la adquisición de la vivienda

AGENCIA EFE 13/05/2009 11:00

El Gobierno quiere suprimir la deducción fiscal por la adquisición de una vivienda para quienes perciban rentas superiores a 24.000 euros a partir de 2011, como avanzó ayer el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, en la primera jornada del debate.

Para Rajoy, según ha remarcado en declaraciones a los periodistas, el objetivo del Gobierno es "un grave atentado contra los intereses de las clases medias", y, por ello, cuando corresponda debatir las resoluciones en el Congreso, el próximo martes, el grupo popular intentará mejorar la deducción por adquisición de vivienda.

El líder del PP ha reconocido estar "contento" con las intervenciones que protagonizó ayer en su cara a cara con Zapatero, pero ha dado prioridad al desempleo, hasta tal punto que ha afirmado que "las personas que no han ganado -el debate- son los cuatro millones de parados que no han visto respuesta".

Porque, según ha subrayado, Zapatero "no dijo nada" sobre la creación de puestos de trabajo ni sobre la circulación de crédito.

Eso, a su entender, es "lo relevante", y lo demás, en alusión a las medidas anunciadas por el presidente del Gobierno, "un parche y otro parche que no conducen a nada".

"Me llevo la satisfacción por cómo ha ido el debate: hay una alternativa y por el camino que nos lleva Zapatero no vamos a ninguna parte", ha apostillado.

Rajoy se ha centrado en el planteamiento político del debate, un ámbito en el que, en su opinión, "quedó patente la soledad absoluta" del Gobierno en el Parlamento. "Zapatero vino buscando apoyos y nadie se los dio, nadie cree hoy al presidente", ha añadido.

Según ha señalado, la soledad del Gobierno le aboca al cambio, o al menos a la rectificación de su política.

No obstante, Rajoy ha alejado la posibilidad de una moción de censura: "Las mociones de censura no se anuncian, se presentan y luego se cuentan, y ayer hubo intervenciones que se presentaban como tal, pero no debe ser así".

Igualmente ha afirmado que Zapatero "no tiene interés" en alcanzar acuerdos con el PP.

Por ejemplo, sobre la reforma laboral, un extremo que es de obligada reforma para el líder 'popular' y que, por esta razón, su partido intentará pactar con otros grupos, pues "esto no se arregla con parches", sino con "un planteamiento amplio y coherente".

Rajoy ha asegurado que el diálogo social "no está teniendo ningún resultado" y en España un 30 por ciento de los trabajadores son temporales, una situación que el PP quiere solucionar.

También sobre la reforma fiscal, que los populares presentarán a través de un plan "completo" en sus propuestas de resolución.

En definitiva, para Rajoy, los principales problemas que hay en España no han tenido respuesta en el debate y ninguna de las nuevas medidas, ha destacado, van en este camino. "Quien piense lo contrario, está equivocado", ha puntualizado.

El presidente del PP, además, ha reconocido que la intervención inicial de Zapatero no alteró sus planes. "No trastocó nada; sabíamos que iba anunciar un paquete de medidas y no un plan global, ni la rectificación de su política económica".