El secretario de Estado para la UE, Iñigo Méndez de Vigo, ha asegurado este viernes que no ve encaje constitucional ni europeo a una eventual independencia de Cataluña, y ha destacado que Europa no está para "aventuras de nuevos Estados".
En un desayuno informativo de la Fundación Cidob, ha respondido así durante el cologuio posterior a la pregunta del director de la Fundació Campalans, Albert Aixalà, sobre las consecuencias de la masiva manifestación de la Diada del 11 de septiembre que recorrió el centro de Barcelona bajo el lema 'Catalunya, nuevo estado de Europa'.
"Hace tiempo aprendí de los catalanes dos palabras: el 'seny' y la 'rauxa'. Yo quiero que el 'seny' --sensatez-- triunfe", ha subrayado Méndez de Vigo, quien se ha alineado con las posiciones ya expresadas por miembros del Gobierno, como el ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, y ha pedido a los europeístas un esfuerzo de entendimiento y aparcar la exacerbación.
Ha llamado así a no crear un "problema artificial" y a trabajar conjuntamente en el seno de Europa para resolver problemas, principalmente el que ahora el Gobierno y el resto de países de la UE tienen sobre la mesa: la crisis del euro.
EUROPA NECESITA RAPIDEZ
Según él, el proceso europeo se inició mal y la ampliación ha complicado mucho la toma de decisiones en un contexto mundial que se exige tomarlas rápido, pero la UE es "incapaz de tomar decisiones con rapidez, y cuando las toma es incapaz de ejecutarlas con rapidez".
Esta situación y la falta de narrativa que, a su juicio, tiene Europa a la hora de dar respuestas ante la crisis provoca la "desilusión" y la desconfianza de sus ciudadanos, así como la aparición y crecimiento de los partidos populistas.
Mientras ha asegurado que el Banco Central Europeo (BCE) está respondiendo a las expectativas, ha instado a la Comisión Europea (CE) a tener un papel más activo y a hacer un esfuerzo para acometer reformas: "Europa o bien es capaz de participar como Europa en la formulación de las reglas de gobernanza mundial, que se están planteando, o vamos a ser absolutamente irrelevantes".
Iñigo Méndez de Vigo ha celebrado así que la Unión Europea haya expresado su voluntad de avanzar hacia una mayor unidad fiscal, económica y política, aunque ha urgido a ponerlo en práctica.