El impacto económico del colapso del puente Francis Scott Key de Baltimore: "Los estadounidenses deberían esperar escasez de bienes"

El colapso del puente Francis Scott Key de Baltimore, en Maryland (EEUU), después de que un barco sufriera un accidente con uno de los pilares la madrugada de este martes, podría conllevar un impacto económico en Maryland y otros estados de Estados Unidos.

Ryan Petersen, el director de una empresa de gestión de la cadena de suministros, Flexport, ha asegurado ante los medios locales que "los estadounidenses deberían esperar escasez de bienes", ya que "el colapso del puente en Baltimore afecta al transporte marítimo de contenedores y logística de camiones en la costa este: "Y no solo el puerto de Baltimore se verá afectado", ha detallado sobre las posibles consecuencias del accidente del carguero 'Dali'.

Petersen dice que a este suceso hay que sumar los ataques a buques de carga en el Mar Rojo que conectan Asia con Europa y Estados Unidos, que han obligado al tráfico a alejarse del Canal de Suez y rodear la punta de África. Al mismo tiempo, apunta, ha habido una mayor congestión en el Canal de Panamá. Petersen dice que los importadores estadounidenses se están trasladando cada vez más a los puertos de la costa oeste, que a su vez pueden tener sus propios respaldos.

El director ejecutivo de Flexport ha estado trabajando con su equipo este martes para desviar alrededor de 800 contenedores de envío que actualmente se dirigen al puerto de Baltimore: "Es una lucha, porque cada uno de esos contenedores tiene ahora un nuevo viaje para pasar la aduana, hay que conseguir un camión diferente para recogerlo en un puerto diferente, lo que crea una gran cantidad de trabajo posterior", ha sentenciado.

El colapso del puente, asimismo, asestará otro golpe al ecosistema del automóvil en Estados Unidos, que aún se recupera de los reveses relacionados con la pandemia. "Es un puerto grande con mucho flujo, por lo que tendrá un gran impacto", ha dicho este martes el director financiero de Ford Motor Company, John Lawler al canal de televisión de 'Bloomberg'. "Trabajaremos en las soluciones alternativas. Tendremos que desviar piezas a otros puertos a lo largo de la costa este o a otras partes del país", ha añadido.

De su lado, General Motors (GM) también ha dicho que está trabajando para desviar los envíos de vehículos que habían llegado a través del puerto de Baltimore, mientras las autoridades realizan una búsqueda y rescate de quienes cayeron del puente. GM también ha explicado en un comunicado que esperaba un "impacto mínimo" en su negocio por el cierre del puerto. La interrupción se produce cuando los inventarios de automóviles en Estados Unidos están volviendo a la normalidad tras la prolongada escasez de semiconductores y otras piezas automotrices esenciales durante la pandemia de la covid19.

La crisis de suministro durante la pandemia expuso las vulnerabilidades de la industria estadounidense del automóvil, que sufre con la interrupción de la producción o distribución de unas pocas piezas. "Ahora tenemos experiencia en comprender las interrupciones de la cadena de suministro, así que simplemente pondremos en práctica esa experiencia y encontraremos la mejor solución".

Baltimore ha sido durante años el principal puerto de manipulación de vehículos de Estados Unidos, con más de 847.000 automóviles y camiones ligeros procesados allí el año pasado. Los fabricantes de automóviles europeos, incluidos BMW, Volkswagen y Mercedes-Benz, han establecido instalaciones dentro y alrededor del puerto para manejar los envíos de vehículos, explica la agencia.

En lo que va del mes, Mazda tuvo la mayor cantidad de importaciones a Estados Unidos a través de Baltimore por valor en dólares, seguida de Mercedes-Benz, Subaru, Mitsubishi y Volkswagen, según los datos de 'Bloomberg'. El grupo alemán ha señalado este martes que sus operaciones portuarias no se vieron afectadas por el colapso, porque su terminal está ubicada a lo largo de la costa, justo fuera del puente, en lugar de tierra adentro.

El año pasado, Volkswagen recibió, procesó y envió alrededor de 100.000 vehículos a través de Baltimore para concesionarios en las regiones del noreste y del Atlántico medio de Estados Unidos. El fabricante alemán dijo que puede haber retrasos en el transporte de camiones como resultado del accidente. Un portavoz de BMW, por su parte, ha indicado que no esperaba que el colapso del puente tuviera "ningún impacto inmediato en nuestro negocio, aparte de retrasos en el tráfico a corto plazo".

El colapso ya tiene sus consecuencias. Las acciones del conglomerado danés AP Moller-Maersk, dueño del segundo mayor operador de transporte marítimo de mercancías, han caído este martes tras conocerse que el carguero 'Dali', que ha provocado el derrumbe del puente de Baltimore, estaba fletado por la naviera. De esta forma, los títulos de la compañía en el parqué de Copenhagen han caído un 2,75%, hasta las 8.680 coronas danesas (1.163,8 euros).

La cotización de las acciones de Maersk han registrado un vaivén a lo largo de la sesión, con ganancias en un primer inicio a las que siguieron bajadas seguidas de sus correspondientes alzas hasta su estabilización en un rango cercano al -3%. "Podemos confirmar que el portacontenedores 'Dali' es propiedad de Grace Ocean, y que está operado por Synergy Group. Está fletado por Maersk y transporta carga de clientes de Maersk. No había tripulación ni personal de Maersk a bordo del buque", ha asegurado la multinacional en una nota de prensa. El barco, con pabellón de Singapur y de 32.000 toneladas, fue construido en 2015 y ya en 2016 estuvo involucrado en un incidente en el puerto de Amberes (Bélgica) que solo provocó daños materiales.

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