Una muestra de ADN implica al técnico de laboratorio en el asesinato de Annie Le

INFORMATIVOS TELECINCO/AGENCIAS 17/09/2009 06:29

El jefe de policía de New Haven, James Lewis, ya había manifestado que se presentarían cargos contra cualquier persona cuyo ADN coincidiera con la evidencia encontrada en la escena del crimen.

Según Foxnews.com, los resultados de las pruebas de ADN muestran una relación entre Clark y más de 250 elementos encontrados en la escena del crimen.

La policía investiga ahora una habitación del hotel de Cromwell, Connecticut, a unos 25 kilómetros de New Haven, donde Clark ha estado viviendo desde que fue puesto en libertad en la madrugada del miércoles.

Clark, miembro del personal de Yale, trabajaba de limpiador en el laboratorio. Otros tres familiares suyos (su novia, su hermana y su cuñado) también trabajan en el laboratorio de la Universidad. Entre el posible móvil, los detectives investigan la queja de Clark sobre el manejo de Le de los ratones de laboratorio, según el New York Daily News. Según los e-mails que intercambiaron, Clark se quejaba de que Le no seguía el protocolo para la manipulación de los ratones, y ésta se había comprometido a realizarlo correctamente.

El cuerpo fue encontrado el domingo, día en el que Le iba a casarse, emparedado en una pared del edificio del laboratorio donde trabajaba y al que Clark tenía acceso. El doctor Wayne Carver señaló el miércoles que la autopsia de Le determinó que había muerto por "asfixia traumática" debido a la opresión del cuello.

El miércoles la policía emitió dos órdenes de búsqueda de un Ford Mustang rojo que pertenece a Clark. A través de su abogado, Clark ha manifestado su interés en cooperar en la investigación.

Clark vive en un apartamento con su prometida Jennifer Hromadka, con quien planeaba casarse en diciembre de 2011, según la web de la boda de la pareja. Lewis se ha negado a comentar las informaciones que señalan que fue la novia de Clark, Jennifer, la que avisó a la policía de que la noche del asesinato llegó a casa con arañazos y con ropa distinta a la que llevaba cuando salió.

"Es importante subrayar que no se trata de un crimen urbano, un crimen universitario, ni un crimen doméstico, sino de un asunto de violencia en el centro de trabajo, algo que se está volviendo una preocupación creciente en el país", ha señalado el jefe de la policía de New Haven, James Lewis.

Tanto Clark como otros sospechosos han estado bajo constante vigilancia, aunque se desconoce la identidad del resto de personas investigadas.