AI acusa al Gobierno sirio y a Rusia de atacar de forma deliberada hospitales en Alepo

EUROPA PRESS 03/03/2016 12:26

Amnistía Internacional (AI) ha denunciado este jueves que las fuerzas gubernamentales sirias y rusas parecen "haber atacado de forma deliberada y sistemática hospitales y otras instalaciones médicas" en la provincia de Alepo en el norte del país.

La ONG ha realizado un examen de los bombardeos aéreos llevados a cabo en el norte de esta provincia y ha llegado a la conclusión de que éstos se llevaron a cabo en los tres últimos meses para "allanar el camino para que las fuerzas terrestres pudieran avanzar hacia el norte de Alepo".

Amnistía ha señalado en un comunicado que tiene "pruebas convincentes de al menos seis ataques deliberados contra hospitales, centros médicos y clínicas en la zona norte de la provincia de Alepo en las doce últimas semanas". En estos ataques murieron al menos tres civiles y otros 44 resultaron heridos, ha precisado.

"Los ataques (...) continúan una tendencia de atacar instalaciones médicas en varias partes de Siria que equivale a crímenes de guerra", ha advertido la organización defensora de los Derechos Humanos. Incluso durante el "frágil alto el fuego" en vigor, ha añadido, "las fuerzas gubernamentales sirias y sus aliados han intensificado sus ataques contra instalaciones médicas".

NO HABÍA OBJETIVOS MILITARES CERCA

Según precisa la organización, todas las personas entrevistadas han asegurado que "no había vehículos militares, combatientes o líneas de frente cerca de los hospitales atacados y que estos establecimientos cumplían exclusivamente su función humanitaria".

Trabajadores médicos de la ciudad de Anadan y de la localidad de Hreitan, al noroeste de Alepo, han explicado a Amnistía que el régimen de Bashar al Assad tiene como estrategia "vaciar una ciudad o localidad completa de residentes atacando hospitales e infraestructura para facilitar la invasión terrestre".

Según un médico de Anadan, "los hospitales, el agua y la electricidad son lo primero en ser atacado". "Cuando esto ocurre, la gente ya no tiene servicios para sobrevivir" como ocurrió en Anadan, donde a mediados de febrero "la mayoría de los residentes habían huido de la ciudad".

De acuerdo con este doctor, el hospital de campaña y el centro médico de la localidad fueron atacados el 2 de febrero. El primero opera de forma sucinta y el segundo tuvo que cerrar. "El problema es que no todo el mundo puede marcharse", afirma, subrayando que atrás quedan "los ancianos que necesitan atención médica de forma desesperada".

ATAQUES CONTRA INSTALACIONES MÉDICAS

De acuerdo con la Red Siria para los Derechos Humanos, una organización local, al menos 27 hospitales, incluidos ocho en la provincia de Alepo, han sido atacados por las fuerzas rusas y sirias desde septiembre.

Por su parte, la Sociedad Médica Sirio Americana apunta a que al menos trece hospitales han sido atacados en Alepo en bombardeos aéreos desde diciembre y uno fue alcanzado con un misil lanzado desde tierra el pasado 15 de febrero. En estos ataques han muerto cuatro miembros del personal médico y 45 civiles.

La organización Physicians for Human Rights ha contabilizado que desde que comenzó el conflicto en Siria hace casi cinco años se han producido al menos 346 ataques contra instalaciones médicas por todas las partes en conflicto y 705 trabajadores sanitarios han perdido la vida, siendo las fuerzas gubernamentales y quienes les apoyan los responsables de la mayoría de ellos.

ARRASAR HOSPITALES, PARTE DE LA ESTRATEGIA MILITAR

Así las cosas, la directora de Respuesta a Crisis de AI, Tirana Hassan, ha advertido de que estos ataques deliberados por parte de Damasco y Moscú constituyen "una flagrante violación del Derecho Internacional Humanitario". "Pero lo que realmente es atroz es que arrasar hospitales parece haberse convertido en parte de su estrategia militar", ha lamentado.

Esta serie de ataques en el norte de Alepo, ha añadido Hassan "parece formar parte de una pauta de ataques contra médicos y hospitales, una estrategia que ha destruido decenas de instalaciones médicas y matado a cientos de doctores y enfermeras desde el inicio del conflicto".

Los ataques contra los hospitales en las zonas bajo control rebelde alrededor de la ciudad de Alepo han dejado a los civiles que viven en ella "sin otra opción que huir", ha advertido la responsable de Amnistía.

"Los heridos y los enfermeros están varados en la frontera turca o muriendo dentro de Siria porque los hospitales se han convertido en la nueva línea de frente en la ofensiva en la parte norte de la provincia de Alepo", ha lamentado Hassan, defendiendo que "no hay excusa para que un gobierno impida a la gente acceder a atención médica". "No hay excusas para atacar deliberadamente hospital tras hospital", ha remachado.