Merkel, de 59 años, se encontraba de vacaciones en Suiza junto a su marido. La caída se produjo cuando la canciller esquiaba a baja velocidad y sus efectos mantendrán a Merkel en reposo y sin viajar durante varias semanas, según medios locales.
En la agenda inminente de la canciller figuraba un viaje a Varsovia el próximo miércoles y la recepción, el jueves, del nuevo primer ministro luxemburgués, Xavier Bettel. Para esta semana también tenía previsto encuentros con miembros de su partido.