Ashton, que llegó a la región el sábado para tratar de impulsar el proceso de paz en Oriente Medio, se reunió hoy con los titulares israelíes de Defensa y Exteriores, Ehud Barak y Avigdor Lieberman, y esta noche iba a hacerlo con el primer ministro, Benjamín Netanyahu, a su regreso de Egipto.
"Damos la bienvenida a la nueva política (israelí de aliviar el bloqueo).. pero nuestra posición es clara: el bloqueo es inaceptable y contraproducente", dijo la alta representante en una rueda de prensa en Jerusalén con el ministro israelí de Exteriores.
En su segunda visita a la región desde que asumió el cargo, declaró a los medios que la política europea en cuanto a Gaza es que "el bloqueo no sirve a los intereses de ninguna de las partes", ni israelíes ni palestinos.
El jefe de la diplomacia israelí eludió responder a esta exigencia y se limitó a asegurar que el "bienestar humanitario" de la población de la franja es una prioridad para Israel y que "estamos buscando socios serios para mejorar su situación económica".
Lieberman propuso el viernes un plan para que su país se "desconecte" de la franja de forma absoluta mediante una serie de proyectos de infraestructuras en los campos de la electricidad, la desalinización de aguas y el tratamiento de aguas sucias.
Para la alta representante la idea, que no ha obtenido aún el apoyo del gobierno Netanyahu, es tan inaceptable como el bloqueo.
"Seguiré presionando para (lograr) la reapertura de los puestos fronterizos a fin de mejorar la situación económica en la franja y crear un futuro mejor para su población", manifestó Ashton horas antes en un colegio en Gaza regentado por la agencia para los refugiados palestinos UNRWA.
La jefa de la diplomacia europea también se entrevistó en Gaza con empresarios palestinos que se beneficiarán del nuevo programa europeo de "Reconstrucción del Sector Privado", que tendrá unas doscientas empresas beneficiarias -dos de las cuales visitó la alta representante- y unos 22 millones de euros de presupuesto.
"Con esta visita quiero enfatizar la importancia que vemos en la recuperación del sector privado", destacó Ashton.
La iniciativa trata de contrarrestar los devastadores efectos económicos de la ofensiva israelí Plomo Fundido en diciembre de 2008, que además de dejar unos 1.400 palestinos muertos causó una gran destrucción a infraestructuras y propiedades privadas.
La economía de Gaza se ve duramente castigada por la situación de bloqueo a la que Israel la tiene sometida desde 2007, cuando Hamás expulsó a las fuerzas del moderado presidente Mahmud Abás y se hizo con el control de la franja.
En junio Israel levantó parcialmente el bloqueo a raíz de las críticas internacionales por la muerte de nueve activistas en el asalto a la Flotilla de la Libertad, pero la recuperación exige la entrada masiva de materiales de construcción y la exportación de productos.
"Queremos que la gente tenga la oportunidad de moverse libremente y de ver productos no sólo entrando en Gaza sino también saliendo a la exportación", sostuvo la alta representante.
Agregó que en su entrevista con Netanyahu le iba a plantear este asunto aunque por el momento no se habla de "abrir un puerto" sino de "un paso terrestre", la opción que "más apoyo tiene entre los palestinos".
Durante su estancia en la franja la alta representante no se reunió con ningún representante oficial del movimiento islamista, que la UE considera una organización terrorista.
En cuanto al proceso de paz, exhortó una vez más a Israel y la ANP a reanudar el diálogo directo para llegar "a la solución de dos estados", "de la que Gaza también debe ser parte".
"Queremos hacer progresos de mayor alcance en las negociaciones que lleven al conflicto a su fin", manifestó antes de pedir a ambas partes que "inicien negociaciones sustanciales sobre todas las cuestiones relativas al estatuto final".
La jefa de la Política Exterior europea se reunió el sábado con el primer ministro palestino, Salam Fayad, en la ciudad cisjordana de Ramala, a la que regresará mañana para entrevistarse con el presidente Abás y otros líderes de la ANP.