Chávez prevé una "revolución violenta" en Honduras si los militares disparan

AGENCIA EFE 29/06/2009 00:00

"Que no vayan los militares de Honduras a arremeter con sus armas contra el pueblo desarmado, porque estarían abriendo el camino a revoluciones violentas", agregó el gobernante venezolano.

Chávez, quien llegó hoy a Nicaragua para participar en una reunión urgente de la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), citó incluso una frase que atribuyó al presidente de Estados Unidos, John F. Kennedy: "Lo que les cierran el paso a las revoluciones pacíficas, le están abriendo el paso a las revoluciones violentas".

Chávez reafirmó que la agresión contra Honduras "es la agresión contra todos los pueblos de este continente", e hizo un llamado a las "burguesías de estas tierras", a las que acusó de perder capacidad de razonar, a no romper las reglas de la democracia.

"Si las oligarquías de este continente rompen las reglas del juego, de manera tal como lo han hecho en este día (en Honduras), los pueblos tendrán el derecho a la resistencia y al combate", avisó.

"Esa es una advertencia para las oligarquías de este continente", sostuvo.

Antes de esa advertencia, Chávez adelantó que en la reunión de la ALBA se hará lo que "haya que hacer" para restituir en la Presidencia de Honduras a Zelaya, porque "no vamos a permitir más gorilas en este continente".

"Venimos a una reunión extraordinaria del ALBA -dijo- a fijar posición, a ratificar nuestra posición y a comenzar a hacer todo lo que haya que hacer (...) para que se restituya en el Gobierno de Honduras al presidente Zelaya", destituido por el Parlamento y obligado por los militares a abandonar el país.

Chávez, que fue recibido en el aeropuerto internacional de Managua por su colega de Nicaragua, Daniel Ortega, y su esposa Rosario Murillo, indicó que las acciones que tomarán serán "para que se respeten los derechos humanos, la vida del pueblo de Honduras y para evitar una tragedia" en ese país centroamericano.

Entre esas "cosas", Chávez mencionó presiones de tipo político, diplomático y social, así como apoyo moral para restituir a Zelaya en la Presidencia de Honduras.

"Ya basta de gorilas y de golpes de Estado en este continente", insistió.

Chávez anunció hoy, en Caracas, una reunión urgente de la ALBA para apoyar a Zelaya y a la democracia hondureña, convocada por Ortega, según dijo.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, fue el primer mandatario en llegar a Nicaragua para participar en esa reunión y declaró que se encuentra en este país "para defender la democracia no sólo en Honduras, sino que en América Latina".

El anfitrión Ortega dijo que la agenda de la reunión urgente de la ALBA es una "agenda de la muerte, del terror", la cual, dijo, ha sido impuesta por "la brutalidad del terrorismo de las fuerzas más reaccionarias y más conservadoras de toda nuestra región".

Aseguró que los países del ALBA lucharán "contra ese terrorismo", como calificó a lo sucedido este domingo en Honduras.

El líder sandinista dijo que el "golpe" contra Zelaya es parecido al sufrido por el presidente Salvador Allende, en 1973, y el sufrido temporalmente por el mismo Chávez, en 2002.

La ALBA está integrada por Antigua y Barbuda, Bolivia, Cuba, Dominica, Ecuador, Honduras, Nicaragua, San Vicente y Las Granadinas, y Venezuela.

En Managua están previstas para hoy y mañana reuniones de presidentes de la ALBA, el Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) y del Grupo de Río para tratar la crisis en Honduras y ayudar a que Zelaya, que también asistirá, sea restituido en el cargo.

El mandatario hondureño fue obligado hoy por militares a abandonar el país con rumbo a Costa Rica, horas antes de que comenzara una consulta popular que había convocado con el fin de reformar la Constitución del país y que había sido declarada ilegal por el Parlamento y el Tribuna Supremo.