D'Escoto pedirá aplazar la cumbre sobre la crisis económica para dar tiempo a negociaciones

AGENCIA EFE 22/05/2009 18:30

D'Escoto presentará su propuesta en una reunión que la Asamblea General celebrará hoy a las 20.00 GMT, en la que no espera encontrar oposición, dijo su portavoz, Enrique Yeves.

"Nuestra lectura de la situación es que hay una mayoría de países que están de acuerdo", indicó.

Yeves señaló en una conferencia de prensa que las nuevas fechas de la cita podrían ser el 24, 25 y 26 de junio, pero que la decisión final depende de los 192 países miembros de Naciones Unidas.

D'Escoto era "reticente al aplazamiento, pero entiende las fuertes razones, particularmente que hay un muy corto período de tiempo para discutir el documento final", aseguró.

El ambicioso texto, que propone la construcción de una nueva arquitectura financiera mundial, fue presentado con retraso oficialmente el pasado miércoles debido a las discrepancias entre D'Escoto y algunas delegaciones.

"Siendo el lunes (próximo) una jornada festiva aquí en EE.UU. (Memorial Day), eso nos deja con muy pocos días para discutir un documento de esta importancia, y algunas delegaciones consideran que no da tiempo", apuntó Yeves.

La reunión en la Asamblea General coincide con otras citas, como la cumbre de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), convocada por Corea del Sur para principios de junio, y la XXXIX Asamblea General de la OEA, que Honduras organiza entre el 2 y el 3 de junio en San Pedro Sula, dijo.

El documento final tiene como punto de partida el informe sobre la crisis económica global presentado el pasado 26 de marzo a la Asamblea General de la ONU por un grupo de economistas que encabeza el Nobel estadounidense Joseph Stiglitz.

En el mismo, recomiendan a Naciones Unidas que impulse una transformación completa de la arquitectura económica global para superar la actual situación financiera y evitar que se repita.

Entre las medidas que contemplan está la sustitución del dólar como la moneda de comercio internacional y el reemplazo del G-20 por un nuevo Consejo Económico Global en el que se incluyan los intereses de todas las economías del planeta.

Apuestan por imponer restricciones internacionales que eviten el aumento desmesurado de los bancos y la adopción de límites en las transacciones bancarias a los paraísos fiscales.

También son partidarios de crear un nuevo sistema internacional de reservas de capital que no esté dominado por los países más ricos, como es el caso en la actualidad del Fondo Monetario Internacional (FMI).