Según la organización, la mitad de los polluelos que habitan en las granjas se desechan por la simple condición de ser machos.
Viva asegura, según publica el diario Daily Mail, que la realidad es que para eliminarlos se utilizan unos métodos más que crueles.
Tal y como se ha informado, una vez nacidas las crías, éstas se colocan en varias cintas transportadoras para determinar su sexo.
En caso de ser hembras, éstas prosiguen el proceso y, en algunas granjas se les quitan los picos para que no se hieran unos a otros. En el caso de ser machos, estos son eliminados con prácticas que asustan.
La agrupación, que ha grabado con cámara oculta a varias granjas británicas, demuestra cómo para deshacerse de los polluelos algunas veces los gasean y otras los arrojan a máquinas en funcionamiento que los mate en el acto. Fotos: Daily Mail.
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