El ataque causó destrozos en un edificio vacío, en vehículos y parte del pavimento, mientras que dos personas tuvieron que ser atendidas debido a su estado de shock.
Esa ciudad israelí ha sido blanco en varias ocasiones de cohetes disparados desde la franja palestina, especialmente durante la ofensiva militar que Israel lanzó en Gaza entre diciembre de 2008 y enero de 2009, aunque el número de ataques se había reducido drásticamente.
De momento, ninguna facción armada ha asumido la autoría del disparo de este cohete Katyusha, que es de 122 milímetros y tiene un alcance de entre 20 y 30 kilómetros.
Otros cuatro cohetes del tipo Al-Kasam, de menor alcance, y dos proyectiles de mortero han sido disparados contra Israel desde la franja de Gaza la semana pasada, sin que ninguno de ellos originara daños, pues cayeron en zonas abiertas del desierto del Neguev.