El encuentro ha tenido lugar unas horas antes de que Clinton haga pública su renuncia a seguir en la carrera a la Casa Blanca, en parte forzada por líderes de su partido que le han aconsejado que apueste por una imagen de unidad.
Quizá por esa misma presión, Clinton ha enviado un mensaje electrónico a sus partidarios en el que promete que ayudará al senador por Illinois a llegar a la Casa Blanca.
"Siempre dije durante la campaña que apoyaría enérgicamente al senador Obama si se convertía en el candidato del Partido Demócrata y proyecto cumplir esa promesa", ha señalado.
Su equipo de campaña ha emitido, no obstante, un comunicado en el que aclara que la ex primera dama "no está buscando la vicepresidencia" como se había anunciado en prensa. Aseguran que la elección de la candidatura demócrata para este puesto "debe ser tomada por el senador Obama y sólo por él".
Sólo buenas palabras
El candidato demócrata ha tenido palabras de elogio para Clinton, aunque no se ha mojado. De su rival durante los últimos cinco meses ha dicho que "no hay nadie en la historia de la vida pública que sea más inteligente, más perseverante, más dispuesta a ayudar a los necesitados que la senadora Clinton". "Soy mejor candidato gracias a ella".
Lo que no ha dicho es si se convertirán en pareja de hecho para aspirar a la Casa Blanca. "Sólo han pasado dos días, y creo que no sólo me conviene a mí, sino también a la senadora Hillary Clinton, e incluso al Partido Demócrata y al país el estar seguro de que tomo esta decisión de la manera debida", ha dicho el candidato.
A su favor cuenta con que permite a Obama ser fuerte donde ahora es débil pero en su contra tiene el hecho de que, al llevar 16 años en la cúpula del partido, tira por tierra la idea del cambio de Obama.
Su equipo de campaña ha anunciado la formación de un comité de tres personas que se encargará de seleccionar posibles candidatos a la vicepresidencia.
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