Pakistán admite que la matanza de Bombay se planeó "parcialmente" en su suelo

EFE 12/02/2009 11:52

En rueda de prensa en Islamabad, el titular paquistaní de Interior, Rehman Malik, reconoció también que el "supuesto cerebro" de la operación es Zakiur Rehman Lakhvi, comandante del grupo islamista Lashkar-e-Toiba (LeT), al que Nueva Delhi responsabiliza del asalto terrorista en Bombay, que dejó 179 muertos.

Malik anunció que los tribunales del país han abierto un proceso a instancias del Gobierno para perseguir a los culpables de "actos de terrorismo" y "cibercrimen" en relación con los ataques de Bombay, aunque instó a Nueva Delhi a facilitar más pruebas para avanzar en el caso.

Según el ministro, las autoridades han identificado por el momento a ocho sospechosos de estar vinculados con la organización del atentado, todos ellos paquistaníes.

Malik explicó que seis de ellos ya han sido detenidos y algunos de ellos "pertenecen al LeT", grupo islamista contra el que las fuerzas de seguridad paquistaníes lanzaron una operación a principios de diciembre.

Entre los arrestados, además de Lakhvi, el supuesto "cerebro" de la masacre, se halla otra "importante" figura en la organización de los ataques, Hamad Amin Sadiq, a quien sin embargo no ligó a ningún grupo en concreto.

"Parte de la conspiración tuvo lugar en Pakistán y parte en la India. Dos individuos que desempeñaron un papel muy importante están bajo nuestra custodia", abundó.

Otro de los detenidos es un paquistaní identificado como Javed Iqbal, que residía en la ciudad española de Barcelona y efectuó un pago por valor de 238 dólares para el uso de protocolos de comunicaciones a través de internet, según el titular de Interior, que no dio más detalles al respecto.

Malik explicó que Iqbal "ha dado nombres" de más sospechosos a las autoridades paquistaníes y aseguró que Islamabad ha pedido la cooperación del Gobierno español.

"La cuestión no es la cantidad de dinero, sino el vínculo, porque alguien desde Pakistán o la India está utilizando el sistema de España" y otros países, aseveró Malik.

La operación terrorista, que incluyó el asalto a dos hoteles de lujo, un centro religioso judío y una estación de trenes, contó con apoyo financiero, logístico y de comunicación desde otros países, entre ellos Italia y Austria, según la investigación de las autoridades paquistaníes.

Malik también dijo que las autoridades han localizado dos residencias, una en la ciudad meridional de Karachi (la mayor de Pakistán) y otra a dos horas de distancia, que supuestamente fueron empleadas para preparar la operación, así como tres embarcaciones presuntamente utilizadas por los terroristas para trasladarse a Bombay.

"El resultado de la investigación demuestra que estamos comprometidos contra el terrorismo -se felicitó Malik-. Nosotros ya hemos hecho nuestra parte. Pero ahora necesitamos la ayuda de la India, necesitamos pruebas".

Islamabad reclamó a Nueva Delhi las confesiones íntegras que el único terrorista capturado con vida, Ajmal Amir, alias "Kasab", ha hecho a las autoridades indias, así como una prueba de su ADN y las conversaciones telefónicas interceptadas del resto del comando terrorista, formado por diez personas, según la versión oficial.

Malik recordó que "tanto Pakistán como la India sufren la agresión de los terroristas" e hizo un llamamiento para que ambos países asuman su "responsabilidad conjunta" y cooperen para "garantizar la paz en la región".

En Nueva Delhi, el Ministerio indio de Exteriores recogió el guante y difundió un comunicado en el que calificó de "acontecimiento positivo" la respuesta de Pakistán.

Complacido, el Gobierno indio confirmó que Pakistán ha requerido más información y se comprometió a "examinar" las peticiones y "compartir todo lo que pueda" con su potencia nuclear vecina, a la cual, sin embargo, llamó una vez más a que desmantele la infraestructura de los grupos terroristas que actúan en su suelo.

Durante la crisis diplomática entre ambos países, la India ha llegado incluso a acusar a los servicios secretos paquistaníes (ISI) de participar en la organización del asalto a Bombay.