¿Puede una campaña electoral ser racista y machista a la vez? El Partido del Pueblo Suizo lo ha conseguido sin apenas esfuerzo.
Este grupo suizo ha hecho saltar la polémica al contraponer dos imágenes. En la primera, cuatro jóvenes desnudas miran, agarradas de la mano, a la inmensidad del Lago Zürich. En la segunda, un grupo de maduras extranjeras pasadas de peso se bañan en el mismo lago. Sin embargo, algunas fuman y el agua parece más oscura.
Según este partido de inspiración xenófoba, con 64 actas en la Asamblea Federal y el 29% de los votos en las pasadas elecciones, ese es el futuro que le espera a Suiza en 20 años si no se ataja la inmigración ilegal.
En este contexto, el Gobierno suizo ha intensificado desde noviembre su campaña para evitar la victoria, en el referendo que tendrá lugar el 28 de noviembre, del proyecto promovido por el partido ultranacionalista UDC que busca expulsar del país a los extranjeros que hayan cometido crímenes graves.