Abren los colegios electorales en Uganda para unos comicios en los que Museveni parte como favorito

EUROPA PRESS 18/02/2016 07:46

La emisora Radio France Internationale ha indicado que la múltiples colegios no han abierto a la hora a la que estaba previsto, agregando que algunos centros de la capital seguían cerrado dos horas después del inicio de la votación.

Así, ha apuntado a que los retrasos podrían deberse a la falta de material electoral en dichos colegios, al tiempo que ha señalado que, pese a ello, se puede ver a filas de votantes frente a sus puertas.

Museveni lleva 30 años en el poder y se espera que esta votación sea la más disputada hasta la fecha, dado el tamaño y el entusiasmo de las multitudes en los actos de la oposición.

Este lunes, una persona murió después de que las Policía realizara disparos y empleara gases lacrimógenos contra partidarios del líder opositor Kizza Besigye, que lanzaron piedras e instalaron barricadas.

El propio Besigye aseguró el miércoles que sus partidarios podrían llevar a cabo protestas en las calles para disputar el resultado de las elecciones, adelantando que el veterano mandatario "no se irá pacíficamente" si pierde los comicios.

Museveni, de 71 años, ha advertido a sus oponentes de que esperen una dura respuesta de los servicios de seguridad si estalla la violencia. "Quien quiera que intente traer la violencia, verá lo que le haremos", dijo Museveni en su mitin final este martes.

PREVISIONES

Los analistas políticos predicen que Museveni, un firme aliado de Occidente que llegó al poder en 1986, ganará, pero afirman que estas elecciones son diferentes porque el apoyo a la oposición parece haber aumentado significativamente.

Besigye, que fue el médico personal de Museveni a principios de los años 1980 y que se enfrenta a él por cuarta ocasión, es popular en las zonas urbanas, donde hay un fuerte desempleo juvenil.

Otro antiguo aliado de Museveni convertido en rival, el exprimer ministro Amama Mbabazi, también ha conseguido convocar grandes mítines y espera atraer el apoyo de miembros desafectos del partido del presidente, el Movimiento de Resistencia Nacional (NRM).

Pero el mensaje de Museveni de un progreso lento pero firme parece todavía contar con el respaldo de los votantes de las zonas rurales y los analistas señalan que ha construido un sistema de patronaje donde buena parte de la burocracia del país se siente en deuda con el presidente.