Los muertos son dos hombres, ambos civiles, que fallecieron debido a la gravedad de sus heridas horas después de la explosión. En el edificio donde se encuentra el Tribunal Supremo está también la sede de oficina del fiscal general egipcio y de otros organismos judiciales.
La explosión se ha registrado en la puerta principal del edificio que alberga la oficina de la Fiscalía General, de hecho el fiscal se encontraba dentro en el momento de la explosión. De los heridos, las mismas fuentes han confirmado que seis son policías y dos civiles.
Aunque gran parte de los ataques más violentos y con bombas de los últimos meses se han registrado en la península del Sinaí, una región considerada como estratégica por su frontera con Gaza y donde se multiplican los milicianos islamistas, también se han registrado atentados más pequeños en la capital de Egipto y en otras ciudades importantes.
El pasado jueves Egipto vivió cuatro ataques con bombas en El Cairo. Una persona murió y dos resultaron heridas en uno de los ataques que se produjo junto a un restaurante en el barrio residencial de Imbaba, según explicó el Ministerio del Interior.