La mujer, de 32 años de edad, abandonó su hogar con sus dos hijos y dos hermanos, según confirma el Ministerio en un comunicado, el pasado día 13 de febrero, y escaparon vía Ámsterdam. Los investigadores han comprobado que la mujer reservó vuelos y hotel en Turquía, lo que a su juicio demuestra que la huída estaba "bien preparada".
Las autoridades belgas admiten "preocupación" por la situación de los dos menores, que salieron de Bélgica sin el consentimiento del padre, y consideran "probable" que se encuentren "en territorio de guerra" en Siria. Ello hace a los investigadores "temer legítimamente por su bienestar físico y psíquico", explica el Ministerio en un comunicado.
La salida de los niños de Bélgica sin el permiso de su padre no se puede perseguir penalmente, según ha explicado Justicia, porque no se ha violado ninguna orden judicial, por ejemplo la que existiría si la pareja de padres estuviera divorciada. Por ello, las autoridades animan al padre a presentar ante el juez una ordenanza para que sea considerado "secuestro parental internacional".
Varios medios belgas, entre ellos el diario '7sur7', se hacen eco de testimonios del marido y del entorno de la mujer que apuntan a que fue "radicalizada" por la influencia de uno de sus hermanos, tras lo que decidió viajar a Siria y unirse al Estado Islámico.
Además de con sus hijos, la mujer habría viajado acompañada por dos de sus hermanos, uno de 23 años y otro menor de edad.