"Vamos a realizar una evaluación legal a fondo de la Ley de Educación Superior tan pronto como sea posible y presentaremos posibles medidas antes de finales de abril", ha anunciado Timmermans en una rueda de prensa en Bruselas, tras un debate del Colegio de Comisarios sobre la "preocupación" por el Estado de derecho en Hungría.
El Ejecutivo comunitario quiere examinar la compatibilidad de ésta y otras iniciativas con los valores, principios y libertades que promueve la Unión Europea y ofrecerá sus conclusiones antes de que finalice el mes, cuando publique su paquete mensual de procedimientos de infracción contra los Estados miembros.
La reforma educativa no es la única decisión de Orban que preocupa a Bruselas, según ha confirmado Timmermans, que ha apostado por el "diálogo político" para buscar un entendimiento, antes de contemplar ir más allá y activar el llamado 'mecanismo de Estado de derecho', que es un paso previo al proceso para suspender el derecho a voto de un Estado miembro en la UE.
El examen de la Comisión afectará a la ley educativa, que afecta a la financiación de organizaciones no gubernamentales extranjeras, pero también las polémicas medidas en materia de inmigración por temor a que vulneren los principios de no discriminación y las reglas de asilo.
La campaña 'Paremos a Bruselas' impulsada por Budapest días después de que la Unión Europea celebrase sus 60 años de proyecto en Roma es otra de las cuestiones que la Comisión ve con recelo. Timmermans ha avanzado que Bruselas prepara "su propia respuesta" a este cuestionario, enviado por el Gobierno húngaro a todos los hogares del país.
(HABRÁ AMPLIACIÓN)