El Dalai Lama, en el exilio desde 1959, lo ha confesado en una entrevista en televisión. A sus 76 años quiere retirarse a hacer vida privada a la espera de poder regresar a su patria. No es una decisión que le corresponda tomar a él solo por eso sólo llegará después de consultar con los dirigentes de su partido y con el Parlamento en el exilio. Por ahora es sólo un deseo en voz alta: "Creo que me retiraré en los próximos seis meses", ha confesado.
Asegura que no es nada dramático porque desde 2001 el movimiento tibetano en el exilio puso en marcha un mecanismo mediante el cual las decisiones importantes las toma la cúpula política.
"Mi posición es casi de jubilado, y para que esta forma de democracia interna funcione de la mejor forma posible ha pensado que me sentiría mejor si no estuviese implicado de ningún modo en esta actividad". LA