Davutoglu dice que el proceso de paz con el PKK continuará pero advierte al grupo tras los últimos incidentes

EUROPA PRESS 27/10/2014 03:50

"Cuando decimos que continuaremos con determinación (el proceso de paz) no debe entenderse que reconocemos a una organización terrorista ni a sus aliados", ha sostenido, según ha informado el diario turco 'Hurriyet'.

Así, ha afirmado que "nadie puede considerar que las fuerzas de seguridad legítimas de un Estado y los terroristas están en el mismo nivel". "No se puede aceptar que haya una respuesta a la muerte de tres terroristas", ha agregado, en referencia a la muerte de tres miembros del PKK en una operación militar llevada a cabo esta semana en la provincia de Kars (este).

"Los que han llevado a cabo esta acción traicionera --en referencia a la muerte de los tres militares-- serán perseguidos. Se hará todo el trabajo necesario y recibirán su merecido", ha remachado Davutoglu.

Por otra parte, el Estado Mayor ha anunciado que ha sido localizado el cadáver de un guarda comunal que fue presuntamente secuestrado hace dos meses por el PKK. El cuerpo ha sido encontrado colgando de un poste en la ciudad de Tatvan, en la provincia de Bitlis.

Hace unos días, el propio Davutoglu afirmó que el proceso de paz con el PKK podría resolverse en los próximos meses, una muestra de optimismo similar a la expresada por el líder de la formación kurda, Abdulá Ocalan, quien manifestó que el proceso ha entrado en una nueva etapa, al tiempo que aseguró que tiene esperanzas de que termine de forma exitosa.

"Lo que necesitamos es confianza para la paz y la democracia, una voluntad más clara y movimientos políticos más audaces. En nombre del pueblo de esta tierra, nuestra deuda histórica es no alejarnos de nuestra propia solución", valoró Ocalan.

EL PROCESO DE PAZ

Las conversaciones de paz entre el PKK y el Gobierno turco comenzaron en octubre de 2012 con el objetivo de dar fin al conflicto que ha provocado más de 40.000 muertos en tres décadas, y que ha detenido el crecimiento de la región del sudeste de Turquía, de mayoría kurda.

El proceso de paz se ha convertido en una urgencia adicional para Turquía después de que las milicias kurdas comenzaran a luchar en la guerra civil del país vecino, en busca de una mayor autonomía en diferentes partes del norte de Siria, junto a la frontera.

Ankara teme que la violencia en sus intentos de conseguir una mayor autonomía puedan envalentonar al PKK en suelo turco, y acaben poniendo en peligro el proceso de paz.

Los líderes kurdos han hecho un llamamiento al Gobierno turco para llevar a cabo las reformas previstas en las conversaciones de paz con Ocalan, sin embargo, Ankara ha asegurado que para cumplir su parte del trato, los kurdos tienen que acelerar la retirada de su tropas del norte de Irak.

Estas reformas incluyen pasos para impulsar los derechos de la minoría kurda, incluyendo la abolición de la ley antiterrorista bajo la cual miles de kurdos han sido encarcelados por su relación con el PKK.

A través de las reformas también podría garantizarse el derecho a recibir una educación en lenguaje kurdo, así como disminuir el número de votos que necesitan los partidos para entrar en el Parlamento.