El ataque tenía como objetivo romper las líneas de defensa que rodeaban la base con vistas a entrar en el campo militar con coches bomba.
Los milicianos no pudieron atravesar las barricadas y fueron objeto de un contraataque por parte de las fuerzas sirias. Los yihadistas se vieron obligados a retroceder, dejando a sus víctimas en el camino.
El ataque de hoy prosigue dos días de intensos enfrentamientos. Ayer sábado, las fuerzas sirias también se vieron implicadas en fuertes combates en otros puntos de la localidad, sobre todo en Al Huweika y Jebila.