"Un grupo de unas 300 personas, que llevaban distintos tipos de armas, acudieron la noche del 20 de mayo a uno de los barrios cristianos de Minya y atacaron siete casas, incendiando algunas y desvalijando otras" ha afirmado la Iglesia Ortodoxa Copta, de la que eran miembros todas las víctimas, en un comunicado.
Los ataques tuvieron lugar a raíz de rumores de una supuesta aventura amorosa entre un hombre cristiano y una mujer musulmana. El hombre acusado por la comunidad musulmana huyó con su familia de la región el 19 de mayo, un día antes del ataque. La turba arrastró a su madre, una mujer de unos 70 años, fuera de su vivienda y la desnudó en medio de la calle, mientras veía cómo su casa era consumida por las llamas.
Antes de estos arrestos, ya habían sido detenidas 6 personas involucradas en los ataques. Según establece el comunicado del Ministerio, las fuerzas de seguridad egipcias han intensificado sus esfuerzos para capturar a todos los posibles responsables del incidente.
El presidente, Abdelfatá al Sisi, ha pedido públicamente el arresto de todos los involucrados en el ataque y ha urgido a su Gobierno a tomar las "medidas necesarias para preservar el orden público, proteger a los ciudadanos y a la propiedad privada en el marco del Estado de Derecho". Al Sisi también ha ordenado al gobernador regional que reconstruya las viviendas dañadas en menos de un mes.