La Policía recibió un aviso este mes de octubre y hace diez días inició una investigación junto con la Concejalía de Sanidad de Jinan, la capital de Shandong, donde se encuentran las clínicas, según ha informado un responsable policial citado por la agencia de noticias Xinhua.
Se descubrió que varios vehículos y personas realizaban desplazamientos con regularidad entre las dos clínicas, que están a poca distancia una de otra, según la fuente.
En China está prohibido desde 2007 trasplantar órganos de personas vivas excepto si son cónyuges, parientes de sangre o miembros de la familia adoptados o adoptivos.
Sin embargo, parece que existe una gran red clandestina que se aprovecha de la alta demanda de órganos que hay en el país, donde cada año casi un millón y medio de personas necesitan un trasplante aunque solo 10.000 lo consiguen, según el Ministerio de Sanidad.
Este mes de octubre fueron arrestados tres médicos por reunir órganos humanos en la provincia de Hebei. Los tres eran médicos con licencia de Shandong.
(EUROPA PRESS INTERNACIONAL)
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