Para Donald Trump, Putin y Merkel son la misma cosa. Es más, a los dos les da las mismas oportunidades de partida. Se olvida Trump de que el "aliado tradicional" de Estados Unidos en Europa, junto con Gran Bretaña, es Alemania. Se olvida Trump de que Estados Unidos lleva algo más de un año imponiendo sanciones a Rusia por su actuación en Ucrania, y posteriormente por el "hackeo" de los sistemas de seguridad en Estados Unidos.
Se olvida Trump, o no. Considera el presidente electo que el gran error de Angela Merkel y de Europa en general ha sido la doble "moral" respecto de Siria y los refugiados. Un problema que él no tendrá, porque la Administración Obama ha zanjado la cuestión, –incluido en Naciones Unidas–, con la supervisión de la zona por parte de Rusia. Mientras Rusia ya ha ganado en Siria, veremos ahora que tesis se imponen sobre Ucrania.
Trump defiende también una nueva política multilateral. Y ha comenzado pidiendo los papeles. Esta semana pasada llegó una petición a Naciones Unidas pidiendo el 'Disclosure' de todos los gastos de la ONU y de las aportaciones de todos los países. La firma era de Marco Rubio, el senador por Florida. La orden era del equipo de transición.
Respecto de la OTAN, Trump considera que la Alianza Atlántica no está haciendo su trabajo y que es muy costosa para Estados Unidos. Según él, su trabajo debiera ser luchar contra el terrorismo internacional, y su financiación igualitaria entre los países integrantes. Trump ha repetido en varias ocasiones que "Europa no puede pretender que su ejército sea Estados Unidos y que su defensa la pague Estados Unidos".
Trump también tiene opinión sobre el 'brexit', algo que le parece bien, porque Inglaterra será su socio económico y comercial preferente. A su juicio, los británicos se han dado cuenta de que hay sistemas insostenibles, entre ellos cita el de los refugiados.
Esta semana se manifestarán en la capital estadounidense unos 99 grupos distintos, tanto a favor como en contra de Trump. Medidas de seguridad, una vez más, excepcionales para una toma de posesión del cargo que levanta todo tipo de filias y fobias. La manifestación más multitudinaria se espera el día 1 de la era Trump, cuando un millón de mujeres están llamadas a manifestarse en Washington contra Trump.