El expresidente azerí Ayaz Mutalibov, el primer mandatario de la antigua república soviética tras su independencia en 1991, ha regresado a Bakú, después de pasar casi dos décadas exiliado en Rusia, para asistir al funeral de su hijo, según ha confirmado este martes su partido.
Mutalibov, de 73 años de edad, todavía afronta una investigación criminal por su implicación en la violenta represión de las tropas soviéticas contra una revuelta liderada por un grupo de nacionalistas registrada en Bakú en 1990, cuando el ahora expresidente era un miembro destacado del Partido Comunista.
Mutalibov fue elegido presidente tras la declaración de independencia de Azerbaiyán en 1991 y fue derrocado en 1992 durante la guerra con la región separatista de Nagorno Karabaj. Mutalibov se refugió entonces en Moscú (Rusia), donde ha permanecido hasta su regreso a Bakú este lunes.
El expresidente llegó a última hora del lunes al aeropuerto internacional de Bakú y abandonó el aeródromo a toda prisa por la salida VIP sin hablar con la prensa que le esperaba.
Un responsable de su formación política, el Partido Social Demócrata de Azerbaiyán, ha explicado que el expresidente ha regresado a su país tras recibir una autorización del presidente azerí, Ilham Aliyev.
Su hijo Azad, de 49 años de edad, murió el lunes y será enterrado este martes. Por el momento, no está claro si Mutalivob pretende permanecer en Bakú ni si las autoridades azeríes impedirán que salga del país para que sea procesado.