En su comunicado, ha dicho que Hamás es responsable de todo ello, agregando que la formación islamista "pretende perpetuar" el conflicto entre ambas facciones e intervenir en los comicios, según ha informado la agencia palestina de noticias Maan.
Al Fatá ha publicado el documento un día después de que hombres armados asaltaran al coordinador electoral de Al Fatá, Ramadán Baraka, en la ciudad de Bani Suheila, situada en el sur del enclave palestino.
La familia de Baraka ha asegurado que hombres enmascarados le secuestraron y trasladaron a un lugar no identificado, donde le interrogaron sobre las elecciones antes de dejarle libre y con varias heridas cerca de Jan Yunis.
Al Fatá ha apuntado además que Erigal al Shami, abogado y candidato afiliado al partido en la localidad de Bani Suheila ha sido también amenazado, al igual que Wisam Abu Rjela y Ahmad Qadeh, candidatos por la ciudad de Juzaa.
"Estas prácticas llevadas a cabo por Hamás pretenden impedir los esfuerzos de Al Fatá para poner fin al conflicto y unificar al pueblo palestino y a los partidos nacionales", ha remachado.
Por su parte, el portavoz de Hamás, Sami Abu Zuhri, ha condenado los intentos de Al Fatá de "implicar a Hamás en los conflictos internos del partido", apuntando a una disputa entre dos listas de la formación en Bani Suheila.
La Autoridad Palestina anunció recientemente que las elecciones se celebrarán el 8 de octubre en todo el territorio palestino, tras lo que Hamás, que controla Gaza, dio el visto bueno al proceso.
Las próximas elecciones municipales son consideradas un importante indicador de lo que ocurriría en otras votaciones. Aún no se ha establecido ninguna fecha para futuros comicios, tanto presidenciales como legislativos, a pesar de que los mandatos de los actuales líderes palestinos terminaron hace años.
Los procesos electorales palestinos siempre han estado ensombrecidos por las tensiones entre Al Fatá y Hamás, que han desencadenado en numerosas ocasiones oleadas de violencia.