La iglesia estaba abarrotada con familiares de las víctimas así como empleados de la compañía Air France.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, acompañado de su esposa, Carla Bruni, miembros del Gobierno, el ex jefe de Estado galo Jacques Chirac, compañeros de la tripulación de la aerolínea y familiares de los pasajeros participaron, también quisieron mostrar su apoyo.
El recuerdo a los desaparecidos, en una celebración interconfesional, comenzó con un mensaje del papa Benedicto XVI, quien expresó sus condolencias por lo sucedido, antes de que el cardenal de París, André Vingt-Trois, evocara al escritor y aviador Antoine de Saint-Exupery, desaparecido también cuando volaba sobre el mar.
En las afueras de la céntrica catedral se congregaron también numerosos turistas y curiosos. Al menos 72 franceses viajaban en el avión que desapareció súbitamente en el radar el lunes pasado.
Francia es el país con mayor número de víctimas en este sinistro, cuyas causas todavía se desconocen. RSO