El incendio de la de la Torre Grenfell, que se cobró la vida de 79 personas, ha llevado a las autoridades británicas a revisar los materiales con el que están construidos decenas de grandes edificios para determinar si, como ocurrió con la tragedia del 14 de junio, hay productos inflamables.
Por el momento, 181 edificios de 51 zonas londinenses --todos los analizados hasta ahora-- no han superado las pruebas.
La empresa estadounidense que suministró el revestimiento en la Torre Grenfell, Arconic, ha anunciado la suspensión de las ventas del producto polémico (Reynobond PE) para su uso en rascacielos, argumentando que existe "inconsistencia" en las regulaciones de distintas partes del mundo.