El presidente francés, François Hollande, ha exigido "el pleno respecto" de los acuerdos de Minsk y ha reclamado la necesidad de "seguir actuando y mantener la presión" tras los últimos incidentes violentos en el este de Ucrania.
Tres soldados ucranianos han muerto y otros doce han resultado heridos en nuevos enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los separatistas prorrusos cerca de la ciudad de Donetsk, en el este de Ucrania, pese al alto el fuego, según ha informado este viernes el portavoz del Ejército.
"Hay situaciones todavía preocupantes", ha admitido el presidente galo, que ha denunciado que sigue "habiendo interferencias" desde fuera, en clara alusión a Rusia.
El presidente francés y la canciller alemana, Angela Merkel, se han reunido este viernes con el presidente ucraniano, Petro Poroshenko, en los márgenes de la cumbre de la Asociación Oriental en Riga para preparar los próximos "contactos" a "distintos niveles" en el marco del formato de Normandía, que también incluyen a Rusia y que según el presidente galo es "el buen marco" para seguir trabajando para tratar de resolver la crisis.
Hollande ha insistido en la necesidad de "ayudar" a aplicar los acuerdos de Minsk, incluido a través de la Asociación Oriental, la iniciativa lanzada por la UE para reforzar sus relaciones con el Este de Europa, aunque ha dejado claro que la asociación "no prejuzga" la adhesión al bloque.
"La asociación no prejuzga de ninguna manera la adhesión. He sido perfectamente claro sobre esto", ha subrayado el presidente galo.
"La Asociación Oriental no ha abierto un conflicto. No comparto la idea de que en Vilna la última vez por el acuerdo de asociación (con Ucrania) se produjo una desestabilización en Ucrania. Precisamente es porque Ucrania quería el acuerdo", ha recalcado Hollande, que ha insistido en que se trata de "permitir a Ucrania estar plenamente asociada" al bloque pero sin prejuzgar su adhesión.